Tres asaltos distintos fueron cometidos contra alumnos del colegio San Roque en las últimas semanas y derivaron en una investigación judicial y policial.

Los hechos ocurrieron el 24 de abril -dos- y el último lunes, y las causas iniciadas quedaron a cargo del fiscal Walter Martínez Soto, quien ordenó al personal de la comisaría séptima un allanamiento en un domicilio de la zona de Constitución.

Según trascendió, el primero de los casos se registró cuando un adolescente de 13 años salió del mencionado establecimiento educativo -sito en Pedraza y Lijo López- y fue abordado entonces por otro menor, que lo intimidó y le robó su teléfono celular. Lo mismo ocurrió luego, ese mismo día, con otro estudiante, pero en este caso el robo lo cometieron dos asaltantes, y uno de ellos poseía una especie de cuchillo entre sus prendas.

Finalmente, el último lunes un tercero caminaba con sus amigos cuando sucedió el tercer hecho: de una vivienda de Mariani y Chubut emergió un joven con un arma blanca e intentó sustraerles sus teléfonos. Luego, De la misma casa, egresaron otros sujetos que empezaron a correr a las víctimas, hasta que lograron ponerse a resguardo.

Con todos estos episodios denunciados, la policía allanó este viernes el inmueble y aprehendió a dos hermanos de 14 y 19 años. En su poder, hallaron un arma de aire comprimido de color negro, un arma de fuego marca “Bersa Thunder” calibre 22 (denunciada como robada en Villa Gesell), una caja de municiones, fundas de teléfonos celulares de diferentes tamaños, colores y marcas, un teléfono celular, un chip marca Claro, prendas de vestir y una yuga.

El mayor de los acusados quedó detenido en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán. El menor, en tanto, resulta no punible pero ya ha mantenido conflictos con la ley penal juvenil.