Luego del conflicto entre recicladores que terminó con un joven de 23 años asesinado y un policía aprehendido, desde este sábado han reforzado la seguridad en el basural y aseguraron el servicio de recolección de residuos.

Fuentes municipales consultadas por LA CAPITAL confirmaron que el playón social en el sector del basural donde se generó la revuelta en la que fue asesinado Emanuel Márquez (23) no funcionará durante el fin de semana, pero aseguraron que el servicio de recolección de residuos se mantendrá durante sábado y domingo -días en los que habitualmente hay menos actividades-: los camiones depositarán la basura en otra área del predio.

Tras la muerte del reciclador, y en virtud del conflicto social que esto conlleva, las autoridades han reforzado la seguridad en el basural para desalentar cualquier intento de represalia.

Según explicaron las fuentes consultadas, la noche del viernes se vivió una tensa calma en el basural, con un grupo policial de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediata (UTOI) que reforzó la seguridad en el predio y que permanecerá en los próximos días.

La muerte de Márquez es investigada por el fiscal Alejandro Pellegrinelli, quien decidió aprehender a uno de los policías que aparece en un video abriendo fuego para contrarrestar el ataque contra el puesto fijo en el que estaba y le causa una herida mortal en la cabeza al recuperador informal.

El episodio de violencia y descontrol se inició el viernes pasadas las 15, cuando un grupo de recicladores intentó adelantarse a la descarga de camiones para comenzar con su faena y esto no fue bien tomado por otro grupo. Los reproches se transformaron en insultos y los insultos en agresión, primero lanzando proyectiles y luego en una lucha cuerpo a cuerpo.

Esto fue advertido por los dos únicos policías de ese sector del inmenso predio. Cuando los efectivos buscaron calmar los ánimos recibieron agresiones directas y antes de que pudieran refugiarse uno de ellos fue despojado de su arma reglamentaria. Fue entonces cuando otros dos policías (una era una mujer) llegaron en apoyo y comenzaron los disparos. En principio había trascendido que los recicladores dispararon “al bulto” y les dieron a tres hombres con los que confrontaban.

Sin embargo, luego de la aparición de un video quedó establecido que quien accionó el arma fue uno de los policías desde la puerta del puesto policial con el afán de protegerse y así fue como baleó a los recicladores.

El descontrol fue absoluto por varios minutos y los policías, aún heridos, pidieron apoyo a los otros dos que estaban apostados en otra área del predio. Estos, a su vez, pidieron por la radio policial urgente apoyo. Casi dos horas después de iniciado el conflicto la policía pudo tomar control del predio a través de la UTOI y de Infantería.