Los transportistas escolares de Mar del Plata se sumaron hoy a una movilización del sector a nivel nacional para exponer la “crítica situación” por la que atraviesan. Hace más de dos meses que están sin actividad y no perciben ingresos, ya que tampoco han podido acceder a ninguna de las ayudas económicas aportadas por el Estado.

Con más de 70 colectivos y camionetas apostados frente al Palacio Comunal, decenas de familias cuya actividad principal gira en torno al transporte escolar se manifestaron este mediodía en la intersección de Luro e Hipólito Yrigoyen. Si bien fueron recibidos por el intendente Guillermo Montenegro, reconocen que la solución -en este caso- no depende de la Municipalidad.

“Estamos desde el 16 de marzo sin trabajar. La situación es crítica, sumado a que venimos de un verano en el que la mayoría no trabajó con las colonias de vacaciones. No hemos recibido el IFE, ni subsidios de ni nada. Necesitamos al menos un crédito para subsistir estos meses porque la angustia es terrible“, manifestó en diálogo con LA CAPITAL Cristina Rubio, una de las voceras del sector en la ciudad.

Los transportistas debieron dar de baja el seguro de los vehículos al no tener actividad debido a la suspensión de clases. “Aguantamos al principio pero en un momento fue comer o pagar el seguro, y elegimos comer”, planteó.

El malestar es generalizado y se extiende en todo el país. Por ese motivo, la movilización fue nacional y se replicó en Mar del Plata con una gran cantidad de familias que dependen de la actividad y se encuentran “sin ningún ingreso” desde que comenzó el aislamiento social, preventivo y obligatorio.

Por otro lado, si bien días atrás el Concejo Deliberante aprobó un proyecto impulsado por el concejal Agustín Neme (Juntos por el Cambio) para que los trabajadores de este sector puedan cubrir los traslados del personal exceptuado para evitar la utilización del transporte público.

En estos dos meses, los trabajadores no dejaron de buscar alternativas para subsistir y ofrecieron sus servicios a las empresas y sectores exceptuadas del aislamiento para poder llevar a sus empleados, como establecen los protocolos. “Las empresas no tienen plata y no nos pueden pagar”, expusieron los transportistas en ese sentido.

De todos modos, el concejal Agustín Neme los recibió en el marco de la protesta. Les pidió el listado de los transportes y propuso generar un nexo con las empresas, a los fines de implementar la ordenanza y generar un acompañamiento para el sector.

Sin embargo, en lo que hace a su actividad central, todo indica que hasta que no se retomen las clases en las escuelas, los trabajadores del sector no podrán regresar a su tarea.

No obstante, “todavía no hay fechas para la vuelta a clases; se habla de agosto o septiembre, pero ¿qué hacemos mientras tanto?” y además “cuando vuelvan las clases, no todos los padres van a querer mandarlos, estamos en un círculo sin salida”, apuntaron.

En el marco de esta manifestación, señalaron que el reclamo apunta principalmente al Gobierno nacional y a la Provincia de Buenos Aires, aunque consideran que el Municipio podría ayudar. “Estamos pidiendo que al menos nos den un préstamo de 30.000 pesos por mes que se lo devolveríamos cuando volvamos a trabajar, no queremos un plan social ni un subsidio, somos gente de trabajo”, indicó la vocera.