Temen que el proyecto de asfaltar un tramo de la ruta 77 perjudique a Mechongué
La concejal Mariela Climente realizó un pedido de informes al Ejecutivo aduciendo que en la pequeña comunidad rural, podrían “quedar aislados”.
MIRAMAR (Corresponsal).- Aunque aún no hubo demasiadas manifestaciones públicas y se mantiene cierta cautela oficial con respecto al futuro asfaltado de la ruta 77 entre el paraje “La Ballenera”, en General Alvarado y Balcarce, lo cierto es que el proyecto conjunto va tomando cada vez más interés por parte de ambos distritos.
En contrapartida, la concejal socialista Mariela Climente presentó a través del Concejo Deliberante, un pedido de informes al Ejecutivo local en donde adujo que vecinos de la pequeña localidad de Mechongué temen “quedar aislados”, si eso finalmente se concreta.
El también llamado camino “Las Piedritas”, tiene una extensión de 50 kilómetros con superficie de tierra o tosca y actualmente se encuentra con varios sectores en muy mal estado, pese que en esa región existe una intensa actividad rural y está rodeado de históricas estancias.
Eso sumado a un sinuoso y bello paisaje, convertirían en un futuro a esta vía en un importante circuito uniendo “las sierras con el mar”, uno de las principales análisis hechos por los jefes comunales Germán Di Cesare y Esteban Reino quienes parecen decididos a que esto finalmente prospere.
“El mencionado gasto podría desestimar la iniciativa de ejecutar la segunda etapa de la reparación del acceso que une la ruta 88 con Mechongué por parte del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires”, especificó Climente a través de un escrito.
“La posible concreción de la obra genera preocupación y dudas en los habitantes de Mechongué, temiendo quedar marginados y aislados”, argumenta otro de los párrafos.
De igual manera, la legisladora socialista, expresó que “una comunidad con 106 años y 1500 habitantes necesita rutas y caminos seguros en buen estado, a fin de relacionarse con centros urbanos vecinos por motivos comerciales, turísticos, sanitarios, educativos y administrativos”.
“El estado deplorable en el que se encuentra el camino que une las localidades de San Agustín con Balcarce y el futuro deterioro, de no tener respuesta inmediata sobre acceso mencionado anteriormente, sentenciaría a los vecinos a quedar incomunicados y postergados, encerrados en la desidia”, reflejó Climente.