Martes,25 de Marzo de 2025
El primero de los episodios ocurrió a la tarde en el barrio Bosque Grande, donde un joven fue atacado y tuvo que ser llevado por su hermana al hospital. A la noche, en el barrio José Hernández, un hombre fue baleado en un supuesto robo y su madre lo llevó al HIGA.
Entre el domingo y la madrugada del lunes, cuatro hombres resultaron heridos en circunstancias que son de investigación. Si bien las víctimas no aportaron demasiada información, hay hechos vinculados al submundo de la droga.
El fiscal Leandro Favaro solicitó la pena de 7 años y 10 meses para Juan José "El Bebe" Rodríguez (41) por comercio de estupefacientes, el decomiso de sus vehículos y una multa de unos 6.000.000 de pesos. La defensa, a cargo de la abogada Sandra Pérez, pidió su absolución.
En dos episodios de violencia diferentes, tres hombres fueron heridos con armas de fuego y, una vez en el Hospital Interzonal, se negaron a aportar información a la policía.
Los hechos ocurrieron entre la noche del viernes y la madrugada del sábado en los barrios Florentino Ameghino y Florencio Sánchez. Las víctimas sufrieron heridas que no revistieron gravedad y la Fiscalía N° 4 inició investigaciones de oficio.
Días atrás fue asesinado Luis Mansilla (19) en un conflicto derivado del uso y disputa de motocicletas robadas en la periferia de la ciudad. Un problema que insume recursos policiales, judiciales y municipales y parece no tener solución.
Fue detenido y acusado de comercialización de estupefacientes. Se trata de un joven de 22 años que tenía encima 43 gramos de cocaína de alta pureza y una balanza de puño.
Tiene 18 años y portaba un arma de fuego con siete municiones colocadas. Al notar la presencia policial en Soler, entre 226 y 228, la arrojó entre pastizales pero fue descubierto. Quedó alojado en la Unidad Penal Nº 44 de Batán.
El hecho ocurrió el viernes pasado pero recién trascendió este miércoles, cuando la policía detuvo a uno de los sospechosos. La víctima tiene 70 años, y sufrió un corte en una ceja al forcejear con los delincuentes.
"Quedate en casa" parece una orden que se respeta a medias en los barrios. El acatamiento en la periferia es significativamente inferior que en el centro y la costa. El movimiento en las calles de algunos sectores del norte, el sur y el oeste de la ciudad parece el habitual y suma infractores.
