“Estamos investigando si hubo fin de lucro con el cadáver”, dijo la fiscal Caro
Así lo aseguró la fiscal Ana Caro. "La profanación de una tumba es una contravención y la sustracción del cadáver está penada en el caso que haya fin de lucro", indicó.
Así lo aseguró la fiscal Ana Caro. "La profanación de una tumba es una contravención y la sustracción del cadáver está penada en el caso que haya fin de lucro", indicó.
El dato es revelador y lo confirmó en su declaración el sepulturero Juan Carlos López. Esto abre la posibilidad de que la profanación estuviera motivada por un ritual. El dueño de la funeraria, que quedó libre, también dio detalles del servicio.
Dos sepultureros excavaron en la tumba donde fue enterrado el féretro con el cuerpo del niño que luego apareció a la vera de la ruta 11. Al hacerlo, allí en el cementerio de Comandante Nicanor Otamendi, encontraron un féretro. Será abierto por la Policía Científica.