Yésica y el final más aberrante: descuartizada en la tierra de la esperanza
En 2004 optó por dejar Ecuador cuando aún no se llamaba Yésica. Llegó a Argentina con el sueño de crecer y encontrar una nueva vida. Unos años después, sumergida en el mundo de la prostitución, la violencia y el delito, Yésica fue asesinada, descuartizada y sus restos arrojados frente a un restaurante.