Una dieta sana en la mediana edad previene el deterioro cognitivo en la vejez
La modificación del estilo de vida -con dietas en las que abunden alimentos vegetales ricos en potasio, calcio y magnesio, y una mínima cantidad de grasas saturadas, sodio y azúcar- repercute en una mejora de la función cognitiva a partir de los 60 años.