Denunció al padre, al tío y al abuelo por abuso pero fue “demasiado tarde”
María T. tiene 35 años y vive con sus dos hijas. Recién en enero pudo hablar ante la Justicia y contar los tormentos que habría sufrido entre los 3 y 11 años. “Vivo con miedo, me siento desprotegida por el Estado. Los traumas y el dolor que me causaron no prescriben para mí”, expresó.