Con tener talento no te alcanza: ¡A cazar la regadera!
“Podés virar tranquilamente a otras zonas argumentales, no tenés por qué aferrarte a la idea original” es una de las moralejas que el Tío Marce enseña a Pukkas en este capítulo número 40. Y para ilustrar la cuestión, el alumno trae una famosa reflexión de George R. R. Martin.