Netanyahu: “Israel no puede aceptar el fin de la guerra en Gaza”
El primer ministro israelí rechazó la condición impuesta por Hamas para un alto el fuego que permita liberar a los rehenes en el enclave palestino.
El primer ministro israelí rechazó la condición impuesta por Hamas para un alto el fuego que permita liberar a los rehenes en el enclave palestino.
El gabinete de guerra del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, estaba celebrando reuniones "para discutir cómo destruir los últimos vestigios, el último refugio de los batallones de Hamás, en Ráfah y en otros lugares", dijo el portavoz del gobierno, David Mencer.
El primer ministro israelí culpó a Hamas de "exigencias extremas" cuyo objetivo es poner fin a la guerra "para garantizar su supervivencia, (y) su capacidad de poner en peligro" a los ciudadanos y soldados israelíes".
El mandatario demócrata conversó por teléfono con Netanyahu tres días después del ataque aéreo israelí que asesinó a siete colaboradores de la organización benéfica Word Central Chicken (WCK), fundada por el chef español José Andrés.
La negativa se produce después de que el grupo islamista le hiciera llegar a la contraparte israelí una última propuesta de una tregua en Gaza con pequeñas modificaciones.
El gobierno de Netanyahu argumenta que tal reconocimiento, después del ataque de Hamas que dejó unos 1.200 muertos y 250 secuestrados, representaría "una enorme recompensa a un terrorismo sin precedentes e impediría cualquier futuro acuerdo de paz".
Una delegación del grupo islamista palestino también arribó a la capital egipcia para discutir una propuesta de Estados Unidos, Egipto y Qatar de alto el fuego.
"La reunión de París sirvió para consolidar las propuestas; la propuesta fue aprobada por la parte israelí y ahora tenemos una primera confirmación positiva de la parte de Hamas", indicó el portavoz qatarí, Majed al Ansari.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ya desestimó días atrás las acusaciones de Sudáfrica y dio a entender que no sentiría ningún tipo de obligación para acatar los veredictos de la CIJ.
La ONG internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) dijo que su personal quedó atrapado dentro del Hospital Nasser con unos 850 pacientes y miles de personas desplazadas porque las calles circundantes eran inaccesibles o demasiado peligrosas.