Las precauciones frente a la propagación del coronavirus en la ciudad comienza a mostrar sus primeras consecuencias. Si bien desde todos los sectores manifestaron su apoyo a las medidas implementadas tanto a nivel nacional como provincial y local, las fuertes restricciones establecidas indefectiblemente traerá aparejados perjuicios económicos de toda índole.

Entre quienes ya comenzaron a percibir esto fueron los taxistas, que en los últimos días vieron disminuir la cantidad de viajes diarios que realizaban por la menor cantidad de gente en las calles y la preferencia de los pasajeros a trasladarse caminando o en sus propios automóviles.

“La cantidad de viajes por día ha caído más del 50%. Realmente estamos haciendo un viaje por hora”, señaló a LA CAPITAL el presidente de la Sociedad de Conductores de Taxi y Servitaxi, Raúl Vicente.

Según indicó, desde que las recomendaciones comenzaron a ser más estrictas y específicas, muchos conductores prefirieron no salir a la calle y resguardarse en la seguridad de sus hogares.

“Ya hay un importante grupo de taxistas que han parado sus autos. Una parte porque son mayores de 65 años y, por lo tanto, constituyen un grupo de riesgo y deciden quedarse en casa para no estar tan expuestos. Otro grupo -más importante-, también, pero en este caso lo hicieron al ver que la cantidad de viajes por día había disminuido y consideran que no tiene sentido estar trabajando y seguir corriendo siempre la posibilidad de contagiarse”, señaló el dirigente.

Pese a las complicaciones que esta situación provoca en el sector, Vicente se mostró a favor de las restricciones e, incluso, criticó a quienes no acatan el aislamiento social y siguen paseando por la ciudad, exponiéndose y exponiendo a toda la población.

“Si bien el cierre de los colegios, restaurantes, shoppings y demás comercios ha disminuido la cantidad de gente en la calle, todavía estamos lejos de tener una ciudad paralizada. Fundamentalmente en el horario comercial, de 9 a 20, hay una actividad comercial importante, lo que significa un flujo de gente que se sigue movimiento dentro de la ciudad, algo que evidentemente no es el objetivo buscado desde los organismos de salud, que pregonan que en la calle solo debería circular la gente de los servicios esenciales“, señaló.

Y agregó: “Si esto se pudiera lograr, seguramente la cantidad de contagiados sería menor”.

Por otra parte, y en línea con la posibilidad de que el Gobierno nacional termine decretando una cuarentena obligatoria, Vicente opinó que debería contemplarse la posibilidad de “tan sólo reducir” la cantidad de taxis y remises que circulan por la ciudad.

“Lo importante, creo, es no paralizar totalmente el servicio porque mucha de la gente que hoy consideramos esencial, sobre todo el personal de salud, se mueve exclusivamente en taxis o remises para ir a desarrollar su trabajo, disminuyendo así al máximo la posibilidad de contagio, sabiendo que en estos momentos son imprescindibles para no agravar mas el panorama”, señaló.

¿Qué sociedad seremos?

En diálogo con LA CAPITAL, el dirigente de taxistas también puso el foco en algo esencial: ¿qué ocurrirá este fin de semana en Mar del Plata, con un pronóstico ideal para playa?

Sobre esto, Vicente señaló: “Creo que este fin de semana se va a poder demostrar fehacientemente el grado de responsabilidad que tenemos ante la gravedad del problema que debemos enfrentar. Se está anunciado un fin de semana climáticamente muy bueno, con mucho sol, y si los marplatenses o aquellos visitantes que puedan ingresar a la ciudad van a estar en la playa, en los paseos públicos, en la plaza tomando sol, o exclusivamente paseando sin importarle mucho, deberemos reconocer que tenemos una sociedad muy compleja y nos daremos cuenta que el futuro inmediato será muy complicado”.