De recorrida por Mar del Plata, Margarita Stolbizer advirtió sobre el “desgaste” del Gobierno, criticó duramente la gestión de la pandemia y ponderó a Facundo Manes como una figura “para intentar salir de la trampa de la grieta”.

La líder del GEN y cuarta precandidata a diputada nacional en la lista de Juntos que encabeza el neurólogo, también consideró que las PASO del 12 de septiembre serán claves para “discutir” el proyecto de país que representa la oposición.

– ¿Qué es lo que más le preocupa de este momento del país?

– Las incertidumbres, el sin rumbo del Gobierno. Siento que se ha debilitado demasiado aceleradamente. En general los gobiernos se empiezan a desgastar después de la segunda mitad. Esto fue demasiado pronto. Han perdido autoridad. La Argentina no tiene ejemplaridad en los liderazgos. Y todo esto nos marca un destino sumamente incierto. A esto se agrega la situación económica, la sanitaria y la educativa. Estamos frente a un camino que no sabemos a dónde nos lleva. Tengo, sin embargo, la esperanza de que podamos corregir estas cuestiones.

– ¿Eso se puede hacer a partir de estas elecciones?

– Sí, yo creo que las elecciones de este año tienen la importancia de poder poner un freno a esta situación y generar una expectativa y una construcción distinta hacia adelante.

– ¿Cómo se soluciona desde el Congreso?

– El primer freno se pone en el Congreso porque lo que hemos visto es que durante este año y medio de gestión del kirchnerismo hubo un foco en el Congreso, con una mayoría importante en el Senado, que es donde marcó claramente la estrategia política. Tengo una mirada sumamente crítica de lo que fueron los gobiernos anteriores y en los puntos en los que yo trabajo, que están relacionados con la justicia, la estrategia de los gobiernos kirchneristas anteriores fue el enriquecimiento. En esta segunda etapa es lograr la impunidad. Ese es el primer freno que hay que poner. También a todo tipo de atropello que implique lesionar las libertades, los derechos, el funcionamiento de nuestra república.

– ¿Cómo evalúa la gestión de la pandemia?

– En lo económico, lo laboral, lo social, la educación y lo sanitario ha sido muy mala. La sanitaria, cruzada sin ninguna duda por el tema de las vacunas y marcada por una opacidad total. Nunca tuvimos información de a quién le compraban, qué le estaban comprando, por qué a uno y no a otro, cuánto pagaron y cuándo iban a recibir las vacunas.

–Cuando un gobierno atraviesa dificultades suele mirar al pasado y empezar a confrontarlo. Ya lo hizo el de Macri y ahora lo hace el actual. La grieta parece inalterable. ¿Coincide?

–Sí, esto es así. Soy de las que, junto a mi partido el GEN, podemos demostrar que hemos hecho todos los intentos para no caer enredados en una grieta que creemos que ha sido rentable para quienes la practicaron pero muy mala para el país. Nos ha atrapado tremendamente y vemos una sociedad que está también demasiado polarizada. Lo que nosotros buscamos es salir de situación.

– ¿Cómo?

– En función de ese análisis que tenemos, como partido hemos decidido ingresar en una coalición para tratar de incidir sobre el proyecto a futuro de la Argentina. No nos resulta indiferente cuál va a ser el proyecto que la oposición va a presentar en 2023. Además, para nosotros Facundo Manes es un gran aporte para intentar salir de esa trampa de la grieta. Primero porque viene de afuera de la política, no habla del pasado. Cuando habla de la revolución del conocimiento, de la inversión en la ciencia, habla de cómo salir de la decadencia. Eso nos permite discutir futuro y no pasado.

– ¿Se juega en estas PASO la conducción de JxC rumbo a 2023?

– Yo diría que hay un proyecto de futuro, un liderazgo muy claro que también se está jugando, pero hay que entender que lo de Facundo no es un proyecto unipersonal tampoco. Lo de Manes permitió al radicalismo un reposicionamiento dentro de la coalición para discutir en otros términos el proyecto de país que representamos.

– ¿Qué propuestas impulsaría desde la Cámara de Diputados?

– La primera es una agenda de justicia, transparencia y derechos humanos. Es necesario reformar el funcionamiento del sistema de justicia, pero no la reforma que impulsa el Gobierno. Necesitamos tener una política anticorrupción, con una modificación profunda a la ley de ética pública. También hay una agenda de igualdad de género para modificar las normas del trabajo y establecer un sistema de cuidados. Y presenté propuestas para los jubilados, que son un sector muy vulnerable, por ejemplo, en el otorgamiento de préstamos con los códigos de descuento. Les aplican tasas exorbitantes y el jubilado a veces ni se da cuenta que está accediendo un crédito cuando le ponen la plata en su cuenta.