Atlético de Madrid, dirigido por el argentino Diego Simeone y con el ingreso de Angel Correa, empató 1-1 ayer en Londres ante el Arsenal, en la ida de las semifinales de la Europa League, pese a haberse quedado con diez jugadores y sin su entrenador Diego Simeone, por sendas expulsiones, antes del primer cuarto de hora.

Alexandre Lacazette abrió el marcador de cabeza, pero el también francés Antoine Griezmann empató cerca del final, en un partido, en el que el Atlético logró sobrevivir a las adversidades que encontró en el día en que el club español cumplió 115 años.

Los rojiblancos perdieron a los 10 minutos por doble amonesatción al central croata Sime Vrsaljko.
“Estos pibes son una fiera. Estos jugadores del Atlético de Madrid son héroes. Fue un trabajo defensivo para el recuerdo en las copas europeas”, dijo Simeone tras el partido.

El empate permite encarar con optimismo la vuelta de la eliminatoria el próximo jueves en Madrid.

Por su parte, Olympique Marsella dio un paso importante hacia la final tras derrotar en casa por 2 a 0 a Salzburgo. Florian Thauvin y el camerunés Clinton Njie hicieron los goles del ganador, que sufrió la lesión del argentino Lucas Ocampos, sustituido en los primeros minutos de la segunda parte.