A poco más de 24 horas de que el caso de una mujer de 66 años se internara en el Hospital Interzonal de Agudos (HIGA) y en su poder las enfermeras hallaran casi 600 mil dólares y más de 350 mil pesos, continúa siendo un misterio el origen del dinero y los vínculos familiares de la paciente.

Fuentes del caso que consultó LA CAPITAL explicaron que, un día después del hallazgo, todavía son pocos los detalles recabados en la investigación y remarcaron que la suma en efectivo fue enviada a una cuenta bancaria donde es custodiada por la Justicia.

Además, los informantes mencionaron que este miércoles fue a Tribunales un abogado particular que dijo representar al marido de la mujer. Sin embargo, aclaró que el hombre recién iría a declarar ante el fiscal Fernando Castro este jueves, y se retiró.

Por ese motivo, si bien la paciente está identificada y se conoce el nombre de su pareja, todavía no está claro el origen del dinero ni la razón por la que la propia persona decidió internarse en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), más allá de que al momento de hacerlo se encontraba emocionalmente descompensada y con visibles trastornos psicológicos.

Según pudo saber este medio, el estado de salud de la mujer mejoró y en las próximas horas ya estaría en condiciones de dar a conocer su versión de lo ocurrido. Otro dato que trascendió es que la persona fue trasladada a una clínica privada, aunque no se aclararon mayores detalles de esa diligencia.

El caso comenzó en horas de la mañana del martes, cuando un grupo de enfermeras del HIGA hallaron 590 mil dólares y 380 mil pesos entre las pertenencias de una mujer que había sido internada con un brote psicótico. Las profesionales, ante semejante hallazgo en la valija de la paciente, que estaba sedada y no podía valerse por sus propios medios, llamaron a la policía y frente a testigos hicieron el “arqueo” del dinero encontrado.

Según averiguaciones hechas por la policía, la mujer había ingresado previamente al Hogar Galé -un albergue transitorio para mujeres víctimas de violencia de género, solas o acompañadas de niños- y que previamente habría denunciado a su esposo por golpeador.

Una vez en el Hogar Galé, la mujer sufrió un brote psicótico, por lo que tuvo que ser trasladada al HIGA. Sin embargo, la versión con la que la mujer ingresó al nosocomio no pudo ser verificada, porque padecía un trastorno psicológico que podría ser síntoma de esquizofrenia y eso hizo que no lograra dar una declaración coherente a las autoridades.

Ante el hallazgo del dinero, la policía avisó a la fiscalía de turno, a cargo de Fernando Castro, a quien le llevaron el dinero en una caja de vino.

El fiscal Castro tomó los fajos de billetes -dólares provenientes de bancos de Estados Unidos, del banco Galicia y Francés- y juntó a los pesos los secuestró y los depositó en una cuenta del Banco Provincia.

Por el hecho se inició una causa por “hallazgo” e investiga la procedencia del dinero, si es lícito o no.

Más tarde, la mujer fue llevada a una clínica privada de la ciudad, ya que cuenta con obra social.

Al tomar estado público el caso, en Tribunales también se presentó un hermano de la mujer, con quien no tenía relación en más de 10 años, y se puso a disposición de los investigadores. Según trascendió, también hubo algunos oportunistas que quisieron hacerse pasar por supuestas parejas de la mujer, para intentar reclamar el dinero.