“Si venís ahora lo agarrás, está adentro con la reja cerrada”, el mensaje que delató al asesino de “Lele”
Un ciudadano interesado en cobrar la recompensa ofrecida por el Ministerio de Seguridad bonaerense dio la información necesaria para que se consumara la detención de José Maximiliano Vergara. La policía llevaba un año y tres meses buscándolo.
José Maximiliano Vergara.
“Si venís ahora lo agarrás, está adentro con la reja cerrada“. El mensaje de este martes pasado el mediodía denotaba un diálogo previo. El ciudadano que lo enviaba al investigador ya había adelantado su intención de cobrar la recompensa ofrecida por el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires para quien diera datos sobre el paradero de José Maximiliano Vergara (36), el autor del crimen del DJ Leandro “Lele” Gatti.
Fue entonces cuestión de minutos: el texto llegó a destino a las 14.50 y 15.30 el prófugo más buscado de la ciudad estaba detenido. “Está adentro con la reja cerrada, escuchando música”, completaba el testigo cuya identidad es reservada por obvias razones de seguridad personal, quien ahora podría cobrar entre 2 y 4 millones de pesos conforme lo indican las publicaciones del gobierno bonaerense.
Según pudo saber LA CAPITAL, los miembros del Gabinete de Homicidios de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local habían llevado adelante la búsqueda de Vergara, así como también la del acusado que aún no fue hallado, Maximiliano Urra Zapata, en forma intensa entre los últimos meses de 2021 y los primeros de 2022. Luego, comenzaron a sospechar que el primero se había ido de la ciudad.
Sin embargo, en las últimas semanas distintos datos reimpulsaron la búsqueda y finalmente este martes el presunto autor material del crimen de “Lele” cayó. Ahora, resta que sea detenido Urra Zapata, quien en abril del año pasado pudo escaparse de los efectivos tras un tiroteo en el barrio General San Martín.
Vale recordar que por el homicidio del DJ ocurrido en horas de la madrugada del domingo 26 de septiembre de 2021 durante un asalto en Playa Grande están presos Luis Itzcovich, que conducía la motocicleta con la que los delincuentes cometieron el hecho, y Fernando Romito, jefe de seguridad del boliche Mr. Jones que para la fiscal Andrea Gómez fue el “entregador”.
El crimen
El domingo 26 de septiembre del 2021 siendo aproximadamente las 6, cuando Leandro Gatti se retiraba de Mr. Jones, en Playa Grande, y fue abordado por dos hombres que iban en moto, identificados como Itzcovich y Vergara, quienes contaban con el apoyo de Urra Zapata, que los esperaba en un Renault Clio.
Vergara amenazó a Gatti con un arma de fuego y le exigió la entrega de sus pertenencias, al pensar que era quien llevaba la recaudación del bar. La víctima, al resistirse, recibió un disparo mortal en el tórax, que le provocó el fallecimiento por un paro cardiorespiratorio.
Los delincuentes se apoderaron del bolso de “Lele”, en el que llevaba su computadora y equipos de sonido. Para la fiscal, el golpe fue planeado gracias a la información brindada previamente por el jefe de seguridad de Mr. Jones, Romito, quien les aportó los movimientos y horarios de los empleados y el momento en que iban a sacar el dinero de la recaudación.
El lunes 27 de septiembre por la tarde, después de verse cercado por la policía y de la conmoción social y la repercusión nacional que había tomado el caso -que provocó hasta que el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, viajara a la ciudad-, Itzcovich se entregó en la comisaría novena y quedó detenido. Para identificarlo había sido clave el análisis de las imágenes tomadas por las cámaras de seguridad emplazadas en distintos puntos de la ciudad.
Por su parte, Romito fue detenido días después y acusado de haber sido cómplice de los delincuentes, ya que mantenía relación con uno de ellos. Antes de ser capturado, el entonces jefe de seguridad de Mr. Jones había llegado a participar de una marcha en reclamo de justicia por el crimen del DJ, lo cual causó indignación e impotencia entre sus familiares y allegados.
En tanto, la fiscal Gómez logró identificar a Urra Zapata y Vergara como los restantes delincuentes que cometieron el hecho, pero ambos -que tienen frondosos antecedentes penales- pudieron mantenerse prófugos