Si se aprueba la Ley Ómnibus, el Festival de Cine de Mar del Plata podría desaparecer
El Espacio Audiovisual Nacional advirtió sobre la caída del cine y alertó sobre los sectores que podrían dejar de funcionar, entre ellos la prestigiosa Enerc. Se "pone en riesgo la continuidad del cine argentino", indicó el comunicado.
De aprobarse el mega proyecto de ley que el Poder Ejecutivo Nacional comandado por Javier Milei envió al Congreso, el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata podría desaparecer. Así lo advierte un documento que hizo público el Espacio Audiovisual Nacional (EAN).
Unico calificado como de clase A en toda América Latina, el Festival de Cine de Mar del Plata que se realiza cada mes de noviembre desde 1994 es una cita obligada para directores, productores, actores, actrices y músicos del mundo, entre otros oficios vinculados al cine. Lleva ya 34 ediciones.
Además, tiene un gran alcance popular entre espectadores y espectadoras marplatenses. Y su historia se remonta a 1954, cuando fue creado por Juan Domingo Perón, luego fue interrumpido durante los gobiernos militares y se lo recuperó recién en la década del ´90.
La financiación de este Festival es una de las funciones que lleva adelante el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa). “El Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y el mercado Internacional Ventana Sur (el más acudido de la región) corren riego de desaparecer”, indicó el comunicado.
El Espacio Audiovisual Nacional (EAN), integrado por diferentes colectivos del sector, alertó que el proyecto de ley ómnibus enviado por el Poder Ejecutivo al Congreso “pone en riesgo la continuidad del cine argentino y si se avanza con la propuesta”, la actividad “dejará de existir”.
“El proyecto no solo modifica la composición administrativa del Instituto Nacional del Cine y las Artes Audiovisuales (Incaa), sino que también le quita una parte importante de sus ingresos, al limitarlos únicamente al 10 por ciento de la venta de entradas de cine, eliminando el 25 por ciento de lo que el Enacom le cobra a las televisoras”, se precisa desde el EAN.
En el comunicado, la asociación comentó que la industria audiovisual “genera trabajo genuino para más de 600 mil personas y representa el 5,2 por ciento de la economía” de manera directa e indirecta”.
“Además, si bien estipula que al menos 75 por ciento de los fondos del Incaa deberán ser destinados al fomento de la producción audiovisual, limita a un proyecto cada dos años por productora”, agrega.
Otros puntos sobresalientes del proyecto de ley es la apertura de créditos para producir, pero con una tasa “de mercado”, según el texto ingresado el martes a la Cámara Baja del Parlamento Nacional.
En cuanto a la Enerc, que es la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica cuya sede central está en Buenos Aires y funciona una sede en Mar del Plata, podría cerrarse.
“Eliminan de las obligaciones del Fondo de Fomento mantener la ENERC, lo cual significa cerrar todas las sedes de la prestigiosa escuela de cine si se considera que no hay fondos suficientes”, señaló el sitio especializado Otros Cines.
Cabe señalar que el EAN está integrado por la Asociación de Productores Independientes de Medios Audiovisuales (APIMA), Directores Argentinos Cinematográficos (DAC), el Proyecto Cine Independiente (PCI), y la Sociedad General de Autores de la Argentina (Argentores).