CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
La Ciudad 28 de octubre de 2018

Segundas marcas, menos salidas y aprovechar las ofertas: los cambios de hábitos para afrontar la crisis

Recortes en los gastos cotidianos, compras comunitarias, descuentos y hasta aplicaciones en el teléfono con ofertas en mayoristas son algunas de las estrategias. Tiempos de "modo ahorro".

Aprovechar las ofertas, una de las claves en tiempo de crisis.

El uso del auto para ir a trabajar, las salidas a cenar o la invitación a los amigos a comer un asado quedó en el pasado para algunos. Las variables económicas, que muchas veces en las pantallas se asemejan al dibujo de un electrocardiograma de un corazón con problemas, afectan la vida cotidiana de los marplatenses que debieron modificar costumbres y hábitos a causa de la billetera que se queda sin plata antes de fin de mes. “La plata no alcanza” es una de las frases más repetidas, con mayor o menor frecuencia, en todas las franjas de la sociedad.

Una encuesta de D’Alessio/IROL detalló que 8 de cada 10 consumidores se pasaron a segundas marcas y las utilizan en el 20 a 60 por ciento de sus categorías de compras.

El consumo masivo no es el único segmento en el que los argentinos se ajustan. El relevamiento también mostró que el gimnasio, el apoyo escolar, las actividades extracurriculares de los chicos, el entretenimiento, los viajes y las comidas fuera de casa son los rubros en los que los recortes ya son un hecho. Con mayor fortaleza resisten segmentos como medicamentos, celulares, colegios privados y conexión a Internet.

Cargando las bolsas de la compra en el supermercado el miércoles del 50 por ciento de descuento con tarjetas del banco Provincia, Graciela contó: “Hay que cuidarse en todo. Al supermercado vengo con esta promoción y compro casi para todo el mes, porque enseguida se llega al tipo de lo que te reintegran”.

Si bien la mujer confesó que achicó “todos los gastos posibles”, reconoció que hay ítems que son “innegociables” como “el colegio de los chicos”. “Como son tres tenemos descuento, pero es un presupuesto”, dijo.

Ajustes

Romina y Gabriela llegaron a la ciudad desde Santa Teresita y Bariloche, respectivamente, para estudiar Psicología en la Universidad Nacional de Mar del Plata. Viven solas y definieron a estos tiempos como “de crisis”.

“Nos cuidamos para gastar menos, como almorzar en el comedor universitario donde el plato del día, para los estudiantes, es de 30 pesos”, explicó Gabriela.

Otro ítem consiste en gastar poco a la hora de las salidas, para lo que recurren al clásico “tarjetero así no pagamos entrada”. “Nos fijamos en todo, te diría”, dijo Romina.

El pago de los servicios también les influye en lo cotidiano aunque. “No afectó tanto el aumento en la luz o el gas pero sí el del agua. En el año ya hubo tres aumentos. Descomunal”, describió Gabriela.

La adaptación a la nueva economía también llegó a la casa de Angel, aunque reconoció que con una hija de un año y cuarto meses hay gastos “que son insustituibles, como los pañales”.

Operador de una grúa, contó que está de vacaciones “porque lo decidió la empresa ante la baja de la producción” y enumeró sus estrategias a la hora de ahorrar.

“Caminás, buscás promociones, corté el cable porque era muy caro y ya no puedo invitar más a comer asados a mi casa. Ahora cada uno trae algo o hacemos otra cosa”, contó. Otro de los recortes que aplicó fue a la diversión: “Ya no salimos a comer. Antes podíamos una vez por semana, después cada quince días, ahora ya no vamos”.

Asimismo, Angel redujo la utilización de su vehículo debido “al alto costo del combustible”. “Ahora voy en colectivo a trabajar, tardo más, me tengo que levantar más temprano, pero es más barato”, sostuvo.

Datos

Los números estadísticos pueden transformarse en no aptos para cardíacos. En los primeros 9 meses del año la inflación llegó a 32,4 por ciento y se perfila a cerrar el 2018 en 50 por ciento, con una pérdida de al menos 10 por ciento en el poder adquisitivo. Ante esto, los consumidores diseñan estrategias para ajustar gastos en algunos rubros y esforzarse por seguir activos en otros. Este comportamiento abre nichos para ciertas compañías que se acomodan rápido a las nuevas tendencias y encuentran la forma de crecer en un entorno recesivo.

Según un informe elaborado por Focus Market indicó que en el acumulado de enero a septiembre el consumo cayó 2,8 por ciento, con una baja del 5,3 por ciento solo durante el mes pasado, cuando la inflación llegó al 6,5 por ciento. En esta medición, la caída acumulada es más profunda en el consumo de productos lácteos (-8,3por ciento), limpieza (-7,3 por ciento) y cuidado personal (-5,4 por ciento).

COMPRAS 01

Los análisis de los especialistas no son alentadores. El director comercial de Kantar Worldpanel, Federico Filipponi, sostuvo que “el momento del consumo masivo en Argentina es quizá de los más complejos de su historia” y los hogares quieren hacer rendir al máximo su gasto en la canasta básica. Eso se refleja en que mientras los precios crecieron 109 por ciento en los últimos tres años, el gasto medio de un hogar se incrementó solo en 92 por ciento. “Los hogares usaron estrategias como cambiar el lugar de compra, de marca o buscar promociones para ahorrar esos 17 puntos de diferencia”, detalló.

Lo que queda del año no será fácil. “Proyectamos una caída de 5 por ciento para el segundo semestre, cuando hace un mes esperábamos que fuera de 3 por ciento. Entonces, así el año cerrará 2 por ciento abajo del 2017”, sostuvo el analista.

Orden

Para Andrea, madre de un niño de un año, la cuestión del orden le resultó fundamental para poder maximizar su sueldo y el de su compañero. Pero hay gastos que son irreemplazables. “Antes iba al mayorista y me abastecía casi para todo el mes, ahora vamos comprando de uno o dos paquetes de pañales. Me guío por promociones y ofertas, me avisan mis amigos o familia”, explicó y advirtió: “la misma marca tiene una variabilidad de precio impresionante de acuerdo al lugar donde compres”.

Ante el aumento incesante, Andrea dijo que pensó “cómo muchas madres en la opción de los pañales de tela”.

“Pero me mata la inversión inicial que tengo que hacer, porque necesito bastantes porque por mi trabajo no puedo estar lavando todo el día”, contó.

Para ganar tiempo, se bajó en su teléfono una aplicación -“Tiendero”- que va publicando las ofertas en los mayoristas.

Otra de las estrategias que comenzó a implementar son “las compras comunitarias”. “Nos juntamos entre varios y compramos, por ejemplo la yerba orgánica, por lotes. Es mucho más barata”, explicó.

En la actual coyuntura de ahorro, las segunda marcas y las marcas propias encontraron espacio para crecer. Es el caso de la cadena de supermercados Día. “En los productos de marca propia, los volúmenes se mantienen y logramos captar nuevos consumidores. Día es la marca propia con presencia en mayor cantidad de categorías de alimentos, perfumería y limpieza. Está presente en 7 de cada 10 hogares del AMBA”, señalaron voceros de la cadena. Y especificaron que 1 de cada 2 pesos que se destinan a comprar marcas propias en los supermercados de todo el país corresponden a marca Día.

Este año la marca va creciendo arriba del 40 por ciento, siendo líderes en categorías como papel higiénico, hamburguesas, helados, arroz o aceites pero también en otras un poco más evolucionadas donde las marcas pesan más, como toallitas desmaquillantes, tinturas o snacks.



Lo más visto hoy