El Departamento Ejecutivo calculó tras un estudio de costos que la tarifa del boleto de colectivo debería pasar a valer $690,97, lo que representa un aumento del 132%: en la actualidad, cuesta $297,30.

En el informe al que accedió LA CAPITAL se planteó que “la permanencia de un escenario de crisis nacional del sector y la reducción relativa de los subsidios provinciales y las compensaciones nacionales, derivada del no acompañamiento de las tasas acumuladas de inflación de la economía y su impacto sobre la tarifa, son el denominador común de los sistemas de Transporte Público Colectivo de las distintas ciudades del interior de Argentina”.

Frente a este escenario, “la tarifa técnica calculada, con base en la oferta y demanda establecida por SUBE y los subsidios/compensaciones durante el período febrero de 2023 y enero de 2024, alcanza un valor de $690,97”.

La presentación alertó que, “al igual que en los anteriores cálculos de tarifa técnica de referencia, se confirma la sostenida caída relativa” de los aportes nacionales y provinciales “en relación al costo kilométrico total calculado, ya que éstas sólo absorben el 11,2%”.

El Ejecutivo citó a modo de ejemplo que, en el cálculo de abril de 2021 (período base de marzo de 2020 a febrero de 2021), la cuota que absorbían las compensaciones del costo kilométrico total alcanzaba el 30,4%.

“Esto produce un paulatino y sostenido trasvase de costos del sistema hacia la tarifa que debe asumir el usuario, por lo tanto, se reitera la imperiosa necesidad de su recomposición a fin de evitar el agravio comparativo existente entre los sistemas de transporte del interior del país, AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) y CABA (Ciudad Autónoma de Buenos Aires)”, insistió la gestión municipal.

En el informe se resaltó la necesidad de una “revisión estructural de la política de subsidios por parte del Estado provincial y nacional en su relación al interior, siendo ello imprescindible para la prestación de un servicio público que resulte asequible, equilibrado y que satisfaga las necesidades de la ciudadanía”.

La presentación también esgrimió que el “nuevo equilibrio relativo de precios” fijado por el Gobierno Nacional implicó “un incremento de la mayoría de las variables que ha impactado en la estructura de costos” en el sector del transporte.

Ello se advierte en el combustible, que ha evidenciado un “incremento sustancial en su valor”, lo que impactó en la estructura de costos del servicio: representa el 22,5%. A ello se suman otras variables como el salario de los trabajadores e, indirectamente, la suba en la cotización del dólar oficial, que “supone un cambio en el costo de las unidades 0 Km, afectando en gran medida a la amortización de las mismas”.

A partir de estas consideraciones, este lunes se prevé que la comisión de Movilidad Urbana del Concejo Deliberante continúe el tratamiento del pedido de aumento de boleto solicitado por la Cametap (Cámara Marplatense de Empresas de Transporte Automotor de Pasajeros), lo que motivó el estudio de costos por parte del Ejecutivo para determinar el valor del pasaje.

Como es sabido, la cámara empresario pidió que el boleto de colectivo pase a costar $854,46, lo que implicaría una suba del 187%. La Cametap comunicó que la solicitud se basa en el “desequilibrio en la ecuación económico-financiera” de las empresas por “la brecha tarifaria que hay desde hace años”. Y deslizó que las últimas políticas impulsadas por el gobierno de Javier Milei “agudizan” la situación.

Entre las causas del pedido de aumento, el sector hizo especial énfasis en los subsidios al transporte. “Continúan siendo percibidos asincrónicamente. Siguen siendo recurrentes los retrasos en las liberaciones de las partidas mensuales que cada prestataria debería recibir en plazos que otrora estaban programados y le otorgaban un marco de previsibilidad presupuestaria empresarial”, argumentó la cámara.

En la antesala del plenario de comisión, una opción que se baraja en el seno del oficialismo es delegar de nuevo la facultad al intendente Guillermo Montenegro para que fije el valor del pasaje vía decreto.

Se trata de un instrumento utilizado a lo largo del primer gobierno de Montenegro, cuyo plazo venció en diciembre y aún no fue renovado en 2024. Pero el contexto cambió: durante 4 años Juntos por el Cambio no tuvo mayoría propia y la delegación de facultades fue una salida para concretar los aumentos.

Tras las últimas elecciones, el oficialismo ahora sí cuenta con los votos para que, cualquiera sea su propuesta, pueda avanzar. “El interbloque decidirá si se delegan o no las facultades en la previa de la comisión. Por ahora no está definido”, adelantó un edil oficialista a este medio.