El servicio de transporte público de pasajeros continúa interrumpido por cuarto día consecutivo en Mar del Plata debido a un paro iniciado por la Unión Tranviarios Automotor (UTA) luego de que lo choferes no percibieran los salarios correspondientes a diciembre.

La medida de fuerza se inició sorpresivamente el viernes a la tarde y el gremio que nuclea a los choferes anticipó anoche que se mantendrá “hasta que el dinero esté depositado en las cuentas de los trabajadores”.

El fin de semana el Municipio intimó a las empresas de transporte -a través de cédulas de notificación- para que garanticen los servicios, bajo apercibimiento de aplicar sanciones previstas en el pliego de bases y condiciones.

El secretario de Gobierno, Santiago Bonifatti, indicó “de ninguna manera se puede negar un servicio esencial, perjudicando a los vecinos de Mar del Plata”.

Sin embargo, en plena temporada de verano en pandemia, se cumplirá hoy el cuarto día sin servicio y todo parece indicar que al menos hasta mañana, la situación no se modificará.

La medida de fuerza incluye a todas las líneas urbanas mientras que el servicio interurbano -como la línea 221- funciona con normalidad. “Ellos cobraron una parte y decidieron aguantar hasta el lunes”, explicó una fuente de la UTA.

Según comentaron desde el gremio de los choferes, el argumento esgrimido por los empresarios para demorar el pago se los sueldos es que todavía no se acreditaron los subsidios comprometidos por el gobierno provincial.

Ante esta situación, los delegados de cada una de las empresas prestatarias del servicio tomaron la decisión de paralizar el servicio, sin previo aviso, en la tarde del viernes.

A lo largo del sábado no hubo ningún avance en el conflicto por lo que el sindicato ratificó la continuidad de la medida de fuerza. “Hasta que no esté la plata, seguimos con la medida”, afirmaron desde la UTA.