Un automovilista se escapó de un control policial para evitar el test de alcoholemia y en la huida, mientras era perseguido por un agente motorizado, colisionó contra un deck de la calle Güemes.

Durante la persecución el inspector de Tránsito sufrió una caída que le causó lesiones en una pierna y debio ser internado en el Hospital Privado de Comunidad.

El incidente no tuvo consecuencias mayores debido a que ocurrió en horas de la madrugada, cuando el local gastronómico Grinder estaba cerrado.

Todo se inició en un operativo de control vehicular de la Costa y Roca, por donde pasó el conductor de una camioneta Peugeot Partner. Pese a las señas de los agentes de tránsito se negó a detenerse y emprendió la huida por distintas calles.

Un motorista municipal comenzó a seguirlo pero a 200 metros de la calle Güemes, mientras avanzaba por Avellaneda, perdió adherencia y cayó contra el piso. En tanto, el automovilista llegó a la principal calle del centro comercial de esa zona y se incrustó contra un deck.

Cuando los policías y agentes de tránsito lo retuvieron, fue sometido al test de alcoholemia, el cual arrojó resultado positivo, con un registro de 0,18.

Trascendió que el hombre era oriundo de Miramar, donde fue infraccionado en varias oportunidades.

Los decks son extensiones de los locales gastronómicos que ocupan un sector de las calles. Fueron autorizados en la pandemia de Covid para ayudar a los comercios a volver a funcionar, pero finalmente quedaron como algo permamente.

Aunque están señalizados y tienen algunas defensas, son objetos ajenos al uso de las arterias, por lo cual en muchos casos significan una notable reducción visual para los conductores.

Son numerosos los siniestros producidos pero hasta el momento no han tenido más consecuencias que los daños materiales.