Quilmes empezó este lunes con los entrenamientos para su incursión en la próxima Liga Argentina de Básquetbol, el otrora Torneo Nacional de Ascenso. El primer día, siempre distinto, tuvo un sabor especial para el alero Gregorio Eseverri, integrante de los planteles que consiguieron los últimos ascensos en 2011 y 2013, un jugador que se ganó el cariño de los hinchas “tricolores” por su entrega permanente, de regreso esta temporada para intentarlo una vez más.

“Me sentí muy bien. Es muy lindo volver al club. Me recibieron de la mejor manera, como siempre. Para mí siempre había sido una cuenta pendiente regresar a Quilmes. No se habían dado las posibilidades antes, pero desde el final de la última temporada se comunicaron conmigo para saber de mis intenciones”, reconoció “Goyo”.

“De movida existió la intención de ambas partes de llegar a un trato. En un momento, pareció lejano. Pero finalmente se allanó todo. Creo que hubo mucha voluntad de los dirigentes y mía de llegar a un acuerdo. Y terminamos de darle forma a un arreglo que no comprometa el patrimonio del club y también conveniente para mí”, agregó el nicoleño.

El primer encuentro de la temporada dejó buenas sensaciones en Eseverri. “Sobre todo, Manu (Gelpi, el DT) nos pidió contracción al trabajo en estas semanas. Todo lo que trabajemos ahora va a redundar en beneficio del equipo durante la competencia”, señaló.

“El equipo me entusiasma. Creo que hay una linda mezcla entre jóvenes con talento y experimentados como Maciel, Reinick o yo mismo. Siempre es bueno ese equilibrio”, amplió.

Maximiliano Maciel, casualmente, es el único jugador de este plantel que compartió plantel con Eseverri, justamente en la campaña del TNA 2012/2013, que terminó en ascenso en el Repechaje frente a San Martín de Corrientes.

“Es una alegría volver a jugar con él. Compartimos aquel equipo y casi siempre estuvimos en contacto durante los recesos, ya sea en alguna reunión de amigos o coincidiendo en alguna práctica. Ya nos tomamos los primeros mates antes del entrenamiento”, deslizó Eseverri.

“Obviamente, con él y Reinick, vamos a cargar con la presión para liberar a los más chicos, para que puedan explotar y desarrollarse. Por lo que vi algunos de ellos cuentan con mucha capacidad y tienen lejos su techo. El club ha hecho una apuesta muy grande con ellos. Es el caso de ‘Juane’ De la Fuente, que ya ha jugado Liga Nacional.

Todos confían en él y este torneo tiene que servir para potenciar sus recursos. Lo mismo puede decirse de Jeffrey Merchant, que hizo buenas temporadas en la Liga Argentina. Nosotros estamos para apuntalar a los más chicos”, afirmó “Goyo”.

“Con tantos chicos la idea es hacer un básquetbol muy dinámico, pero todos los equipos comparten esa idea. Este deporte está evolucionando en esa dirección”, completó.

Los objetivos deportivos, a esta altura de los acontecimientos, pueden parecer prematuros. “Creo que el trabajo dirá para qué estamos. Se arme el equipo que se arme, siempre ronda la idea de ascender en Quilmes. Pero todavía es muy apresurado. Creo que lo más apropiado es pensar en el ascenso como un objetivo de máxima”, finalizó.
El primer día

Manuel Gelpi, entrenador del equipo quilmeño, contó con todos sus jugadores en el primer día de prácticas.

Estuvieron los mayores Álvaro Merlo, Raúl Pelorosso, Maximiliano Maciel, Gregorio Eseverri y Alejandro Reinick, los U23 Jeffrey Merchant, Agustín Lecona, Iván Catani y Juan Cruz Germano, los juveniles Juan Esteban De la Fuente, Darío Skidelsky, Ezequiel Martín y Francisco Arraiz y, además, Nahuel Insaurralde y Julián Santamaría, dos jugadores libres formados en las inferiores “tricolores”.
Con la supervisión, además, del preparador físico Sebastián “Tobi” Maffia y de los asistentes Mariano Rodríguez, Guido Lombardi y Juan Cruz Izarra, el plantel realizó una sesión de gimnasio en City Hall y luego practicó en el “José Martínez”.

La rutina para esta semana contempla comenzar todas las mañanas en el citado gimnasio y luego llevar las prácticas de básquetbol al estadio de Once Unidos. Así será hasta el sábado y los jugadores tendrán su primer día libre el domingo.

La idea de Gelpi y su cuerpo técnico es programar partidos recién a partir de la tercera semana. Ya se comenzó a trabajar en la búsqueda de rivales y escenarios posibles.