Sandra vive con tres de sus hijos (una nena de 13, y dos varones de 15 y 19 años respectivamente) en una casa ubicada en Magallanes al 10500. Su casa es antigua, y durante muchos años no pudo tener mantenimiento. Hace unos meses, especialmente después de los primeros temporales del año, empezó a vivir una situación difícil: el techo empezó a ceder. Actualmente, y empeorado por el mal tiempo, la situación es crítica, y está literalmente cayéndose encima.

Por suerte, Mar del Plata es una ciudad solidaria, y después de que su caso se conoció mucha gente se interesó en ayudarla. Así fue como, hace pocos días, recibió la primera ayuda: ocho tirantes de 4 mts.

Este es el primer paso para hacer el techo nuevo, pero no es todo. Gracias al programa Un Sueño, y la solidaridad de Alfredo y el grupo de Cáritas de la Parroquia Nuestra Señora del Huerto, en pocos días Sandra también recibirá ruberoid y chapas.

“Con los días que van pasando se va cayendo cada vez más. Por suerte va a venir mi yerno con un amigo que sabe mucho del tema, y mis hijos que ya están grandecitos van a ayudar también, así que tenemos solucionado el tema de la mano de obra”, relató Sandra, quien también agradeció profundamente a todas las personas que se hicieron eco de su caso, y colaboraron para que pueda mejorar su vivienda.