SAKHIR, Bahrein – El alemán Nico Rosberg se afianzó ayer como líder de la Fórmula 1, al coronarse ganador del Gran Premio de Bahrein y sumar su segundo éxito de la temporada 2016, que también lo tuvo como vencedor en la anterior carrera en Melbourne, Australia.
El piloto de Mercedes, subcampeón mundial en los últimos dos años, llegó escoltado por el finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari) y su compañero de escudería y defensor del título, el inglés Lewis Hamilton, al cabo de las 57 vueltas celebradas en el autódromo de Sakhir.
Ganador de las últimas tres carreras de 2015, Rosberg sumó la quinta victoria consecutiva en la categoría reina del automovilismo mundial y comanda el campeonato actual con 50 puntos. El tiempo empleado para cubrir el recorrido total de 308,238 kilómetros fue de 1h33m34s696/1000.
El germano, que festejó su triunfo número 16 en la máxima categoría, partió desde el segundo lugar de la grilla pero apenas unos metros después superó a Hamilton, dueño de la “pole position” el sábado, y marchó como líder hacia la meta sin dar ventajas.
El actual campeón tuvo un comienzo tormentoso porque, después de ser superado por Rosberg, resultó embestido por el Williams de Valtteri Botas en la primera curva y cayó hasta el octavo lugar, desde el que tuvo que remontar para llegar finalmente al podio con el auto averiado.
Peor fue la jornada para el alemán Sebastian Vettel, cuya Ferrari acusó un problema de motor en la vuelta de calentamiento y ni siquiera pudo largar.
Del cuarto al décimo lugar llegaron el australiano Daniel Ricciardo (Red Bull), el francés Romain Grosjean (Haas), el holandés Max Verstappen (Toro Rosso), el ruso Daniil Kvyat (Red Bull), el brasileño Felipe Massa (Williams), el finlandés Bottas y el belga Stoffel Vandoorne (McLaren), quien corrió el auto de Fernando Alonso. El otro auto de la casa inglesa, conducido por el británico Jenson Button, debió abandonar.