River Plate, que busca un bálsamo para paliar la desilusión que le generó su caída en las semifinales de la Copa Libertadores, intentará este sábado retener el título de la Copa Argentina en la final que animará con un rival inédito en estas circunstancias como Atlético Tucumán, que se ilusiona con lograr el primer título nacional de su historia.

La final de la edición 2017 será a partir de las 19.15 en el estadio Islas Malvinas de Mendoza y será arbitrado por Fernando Rapallini.

El encuentro dispondrá de un operativo de seguridad especial con 700 efectivos debido a que se jugará con la presencia de las dos hinchadas, algo habitual en la Copa Argentina.

El equipo dirigido por Marcelo Gallardo entró en una suerte de “tobogán” tras la eliminación ante Lanús en la Libertadores y sumó seis derrotas en sus últimos ocho partidos.

Desde que perdió con Talleres (en ese encuentro alineó un equipo suplente) previo a la semifinal ante el “granate”, cayó en el superclásico con Boca, luego ante Independiente, Newell’s y por último con Gimnasia.

En ese lapso apenas logró una victoria ante Unión de Santa Fe y otra ante Deportivo Morón (por la Copa Argentina), demasiado poco para un equipo que se había preparado para dominar el continente.

La baja en el rendimiento de la mayoría de los jugadores preocupó a Gallardo, quien públicamente mostró su fastidio más de una vez y apuntó a la obtención de esta Copa para mermar la ponerle fin a la mala racha y terminar el año con una sonrisa.
Para este partido Gallardo podrá contar con el mendocino Enzo Pérez, recuperado de un desgarro y saldrá del equipo Matìas Rossi, de floja actuaciòn en La Plata el domingo pasado.

Atlético Tucumán, por su parte, viene de sacarle el invicto a Colón por la Superliga el lunes pasado con titulares, tras haber reservado a algunos de ellos en el partido adelantado frente a San Lorenzo, y el entrenador Ricardo Zielinski repetirá el equipo que venció al “sabalero”.

Con la confianza demostrada por sus jugadores en la previa del partido de hoy irá por el primer título oficial en la historia del club, lo que marcaría junto a las dos clasificaciones consecutivas a la Copa Libertadores los mayores logros de la institución decana.

En cuanto al camino de ambos en la Copa Argentina, River eliminó sucesivamente a Atlas (de la Primera D), Instituto de Córdoba (B Nacional), Defensa y Justicia, Atlanta (B Metropolitana) y el mencionado Deportivo Morón (B Nacional), mientras que Atlètico Tucumán superó a All Boys (B Nacional), Independiente, Sarmiento de Junín (B Nacional), Vélez y Rosario Central.

El favorito es River, por la categoría de sus jugadores, aunque el “Ruso” Zielinski es un especialista en amargarlo, de hecho era el director técnico de Belgrano de Córdoba cuando lo mandó al descenso en 2011, en un partido histórico.