En el escenario del Instituto Marplatense de Música Contemporánea (Chacabuco 3639), el músico Juan Robles presentará este jueves a partir de las 21 su último disco, que tituló “Perspectiva Buksed”.

Joven pianista y compositor de 19 años, Robles se presentará junto a su banda, que está formada íntegramente por artistas de la ciudad: Teby Frontera en guitarra y coros, Estanislao Cettour en bajo eléctrico, Nacho del Río en batería, Facha Passeri en percusión y Agustín Gainza y Juani Bellozas en los coros. Realizarán canciones de su último disco más temas aún más recientes.

Con influencias de Frank Zappa, Charly García, el Quinteto Real y Tom Waits, Robles crea su propia cartografía. Historias que relatan, por ejemplo, desde la leyenda urbana de Big John Sunday, el mítico actor de cine porno, hasta el fugaz pantallazo de la vida de Remo, un delirante inventor que sueña con asaltar un banco.

Señaló el escritor Marcos Ayciriex sobre la gestación del nombre este disco: “Un mensaje encriptado en la puerta de la heladera, así ha comenzado todo. Después llegaron los amigos, que andaban por ahí cerca; lo demás fue encajar las piezas y, eso sí, la dificultosa tarea de crear y convencer a algunos de los personajes que recorren la compleja cartografía de delirios de Juan Robles para que se metan en este disco”. Y describió la música del joven artista como “un fogonazo de belleza, un material denso e iluminado”.

“Su mentor es actor porno, niño, bestia, revolucionario, inventor en apuros, poeta, músico y amigo. Un tipo joven poseído por el alma de un caracol con la eternidad a cuestas”.

En tanto que para Fabio Morasso, “Perspectiva Buksed puede ser un disco, una organización tribal festejando el fuego, un conjuro invocando la belleza en el camastro de la agonía, la voluntad de la naturaleza de germinar girasoles antes del último eclipse o el simple instante que acontece. Será asunto del que escucha desentrañar eso; mientras tanto, quizás se trate, sencillamente, de escuchar no solo con los oídos, sino con la piel, el pecho, los huesos. Escuchar como quién transita una avenida que debe aprenderse paso a paso y con un poco de sed”.