Este 26 de marzo se llevará a cabo una travesía incluidora, en kayaks, en la laguna de Mar Chiquita, con el objetivo de que los participantes “se sientan importantes” y, sobre todo, que demuestren a los demás que “se puede”.
De la travesía, que partirá desde el Recreo San Gabriel, para llegar al Club Náutico Mar Chiquita, recorriendo unos 14 kilómetros, participarán cinco personas con discapacidades, entrenadores, dos kayakistas profesionales (Daniel Pepe y Dardo González) de acompañantes y hasta “Teo”, un caniche toy, como mascota.
La iniciativa es de la ONG Amanecer y Atardecer Unidos, que tiene como fin ayudar a niños y adultos mayores de bajos recursos y personas con capacidades diferentes y cuenta con apoyo de la colonia de vacaciones “Camino al Sol”, integrada también por los referentes de la ONG, la fábrica de kayaks “Sit on Top”, el grupo MDQ Team, el Complejo CRIM, la revista Pido Gancho, el programa de TV “El ojo curioso” y amigos de la ONG.
Fernando Corbellini, presidente de Amanecer y Atardecer Unidos, destacó que la preparación -tanto física como logística- se inició hace varios meses con el entrenamiento de los chicos y el adulto con capacidades diferentes y las gestiones para contar con todo el equipo.
Vale señalar que la iniciativa fue declarada de interés por el Concejo Deliberante de General Pueyrredon y contará también con el apoyo del área de Desarrollo Social de Mar Chiquita, que está preparando un recibimiento para los kayakistas.
“Vamos a realizar esta travesía con tres chicos que tienen retraso mental madurativo, un chico sordomudo y un adulto también con retraso madurativo, cada uno va acompañado por un timonel. Tres kayaks van sueltos y dos, unidos, con una plataforma central, en la que llevaremos el botiquín de primeros auxilios, bebidas, barritas energéticas y a “Teo” un caniche toy, para que los anime, les dé fuerza y coraje” relató Corbellini en diálogo con LA CAPITAL.
Tras señalar que se tomaron todas las medidas de seguridad, destacó la colaboración de empresas y amigos y apuntó al objetivo de “inclusión”. “No apuntamos sólo a integrar a las personas con capacidades diferentes sino a incluir, que quiere decir no sólo que los chicos se integren a las actividades, sino que las actividades, por ejemplo la colonia, también se adapten a los chicos”.
En ese sentido apuntó que la iniciativa comenzó a tomar forma “con la idea de hacer algo para que los chicos y grandes se sientan importantes, pero se transformó en demostrar a todos los chicos que se puede, que hay un deporte, una actividad que se puede adaptar, mostrarles a un montón de chicos de escuelas 500 que van a estar esperándolos que si estas cinco personas lo pudieron hacer, todos, cualquiera, también lo puede hacer”.
Profesor de educación física de formación, Corvellini aseveró que “queremos contribuir a mostrar que no hace falta sobreprotegerlos, que pueden ir a campamentos, colonias, hacer actividades físicas, estar con sus pares, superarse, ganar autoestima, independencia”.
Y redobló la apuesta. “Esto es una primera prueba, si nos sale bien, luego nos vamos a plantear otros desafíos”.