Quilmes se juega este miércoles el partido más importante de la temporada. Desde las 20, por la última fecha de la serie regular de la Conferencia Sur de la Liga Argentina, visita al difícil Villa Mitre de Bahía Blanca en una verdadera “final” para acceder a los play-off de Reclasificación.

Después de la derrota ante Deportivo Viedma, el equipo “tricolor” quedó obligado a ganar en esta última presentación.

Si pierde, jugará el Play-In. Quedaría en el duodécimo lugar y jugaría el primer filtro como visitante ante el undécimo. Siempre y cuando Gimnasia y Esgrima La Plata no dé la sorpresa y se imponga en su visita al líder Racing de Chivilcoy. En ese caso, será decimotercero y deberá enfrentar al decimocuarto como local para ganarse la chance de medirse con el perdedor del duelo entre undécimo y duodécimo por la última plaza a la Reclasificación. Un escenario impensado poco tiempo atrás.

Si gana, en cambio, asegurará su presencia en la Reclasificación. Si lo hace y pierde Atlético Pilar en su decisiva visita a La Unión de Colón, será noveno.

En cambio, si Pilar se impone puede plantearse una situación de cuádruple empate (Quilmes, el propio Pilar, La Unión y Pico FC) en el octavo lugar o de quíntuple paridad (entre estos cuatro equipos y Pergamino Básquet, si cae en su visita a Ciclista Juninense) en el séptimo puesto.

En el primero de los escenarios, Atlético Pilar será octavo, Quilmes noveno y Pico FC décimo. En el segundo, el “Rancho” será séptimo, el elenco “tricolor” octavo (y jugaría con ventaja deportiva la Reclasificación), Pergamino Básquet noveno y Pico FC décimo.

El abanico de posibilidades, en consecuencia, es muy amplio para los dirigidos por Luis Fernández. Va de un final feliz a otro muy oscuro. En cualquier caso, depende de sí mismo. Y eso siempre es importante.