Envalentonado por su muy buen triunfo del jueves, en el debut en la temporada 2024/25, Quilmes intentará volver a sumar de a dos puntos cuando enfrente este sábado, desde las 21, a Villa Mitre de Bahía Blanca.

El partido se jugará en el “Nuevo Centenario José Martínez”, de Luro y Guido, a puertas cerradas -por la sanción de Aprevide-, por la Zona B de la Conferencia Sur del Torneo Apertura de la Liga Argentina de Básquetbol. Serán árbitros Raúl Sánchez y Martín Pietromónaco.

Un renovado Villa Mitre, que jugó este viernes ante Unión -ver aparte- y eligió jugar en días consecutivos (lo que permite disminuir los costos del viaje), sólo cuenta con el pivote Franco Pennacchiotti como ficha mayor repetida de la temporada pasada.

Los bahienses llegaron a las finales de la Conferencia Sur pero se quedaron sin varias de las figuras de la última campaña. Y también cambiaron al entrenador, puesto que ahora ocupa el marplatense Hernán Ferrero.

Llegaron los bases Juan Cruz Frontera y Joaquín Jasen, el escolta estadounidense Taalib Holloman, el alero Mateo Beigier, el ala-pivote Pablo Bandeo (uno de los primeros jugadores confirmados, fue un expreso pedido del entrenador) y los pivotes Francisco Filippa y Julián Lorca.

Quilmes, por su parte, ganó un partido enorme, tras un desarrollo nada sencillo, en el cual empezó muy bien, luego fue dominado y terminó imponiéndose con lo justo, ante un adversario que juega muy bien, y sin el respaldo habitual de su público.

En ese sentido, se intensificaron las presentaciones conjuntas de Peñarol y Quilmes para solicitar una reducción de la sanción de Aprevide y existe moderado optimismo en que esas tratativas lleguen a buen puerto.
Entusiasmaron la producción integral de Andrés Lugli, el muy buen nivel de Tomás Bervauwede, la versatilidad de Julián Ruiz y la predisposición del equipo para defender.

Nada mal por tratarse del primer partido. Ahora tendrá que sostenerlo en el tiempo.