Google ha anunciado que ya no transferirá “hardware, software y servicios técnicos” a los dispositivos móviles de Huawei con la única excepción de que los servicios seguirán disponibles al público a través de una licencia de código abierto.

Este movimiento de Google responde al cumplimiento de la orden ejecutiva que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump firmó el jueves pasado cuando se declaró una emergencia nacional por la amenaza de ataques extranjeros a la red de telecomunicaciones del país.

La orden ejecutiva impide que las firmas de telecomunicaciones de Estados Unidos utilicen la tecnología proporcionada por países extranjeros que pueden presentar riesgos de seguridad, incluidos Huawei y 70 de sus proveedores.

La medida responde a las sospechas de que la firma tecnológica estaría obligada a espiar para el régimen comunista chino y a robar secretos comerciales, según reportó The Daily Telegraph.

“Estamos cumpliendo con la orden y revisando las implicaciones”, dijo un portavoz de Google esta semana.

¿Cómo afectará esto a los usuarios de Huawei?

Según señaló el portal Bles.com, un representante de Google dijo a Reuters que la tienda de aplicaciones Google Play de la firma y el sistema antimalware Google Play Protect continuarán funcionando “en los dispositivos Huawei existentes”.

Como tal, las actualizaciones de la aplicación de Google seguirán estando disponibles en estos teléfonos, incluidos los teléfonos inteligentes Google Nexus más antiguos que utilizan tecnología de la firma china, según Telegraph.

Sin embargo, los dispositivos futuros del fabricante de teléfonos no se ejecutarán en Android.

En su lugar, Huawei pasará al Proyecto de Código Abierto de Android (AOSP por sus siglas en inglés), una versión más simple del sistema operativo móvil de Google que está abierto al público, informa The Verge.

Eso significa que Huawei no podrá distribuir actualizaciones a sus futuros móviles hasta que estén disponibles en AOSP.

La prohibición de Android también podría significar que los futuros teléfonos Huawei pueden no incluir Google Maps, Chrome y YouTube, informa la BBC.

Así, los teléfonos como el Mate 20 Pro del año pasado y el nuevo P30 Pro no serán compatibles con el nuevo sistema operativo Android Q de Google, agrega el Daily Express.

¿Es Huawei una amenaza real?
Estados Unidos y otros países parecen pensar que sí.

“Huawei es una empresa china de telecomunicaciones dirigida por el estado con un objetivo singular: socavar la competencia extranjera mediante el robo de secretos comerciales y propiedad intelectual, y a través de precios artificialmente bajos respaldados por el gobierno chino”, dijo el Senador Marco Rubio a The Verge.

“El gobierno comunista chino representa la mayor amenaza a largo plazo para la seguridad nacional y económica de Estados Unidos, y Estados Unidos debe estar atento para evitar que las compañías chinas de telecomunicaciones dirigidas por el estado, como Huawei y ZTE, socaven y pongan en peligro las redes 5G de Estados Unidos”, agregó Rubio.

En agosto de 2018, Trump firmó una ley que impedía al propio gobierno estadounidense utilizar equipos de Huawei y otro proveedor de china, ZTE Corp.

En enero, los fiscales estadounidenses acusaron a dos unidades de Huawei en el estado de Washington diciendo que conspiraron para robar los secretos comerciales de T-Mobile, y también acusaron a Huawei y a su director financiero, Meng Wanzhou, de fraude bancario y telefónico por acusaciones de que la compañía violó las sanciones contra Irán.

Australia y Nueva Zelanda han prohibido también el uso de equipos de Huawei en proyectos de infraestructura de telecomunicaciones domésticas en sus respectivos países, mientras que Nueva Zelanda ha impedido además que una empresa nacional utilice los equipos de Huawei como parte de su despliegue de 5G en todo el país.

Asimismo Reino Unido ha prohibido que se utilice tecnología de Huawei en la construcción de la parte central de la estructura de 5G del país, si bien permite la presencia de la controvertida compañía en parte periféricas de la misma.