El juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla procesó este lunes con prisión preventiva a Marcelo D’Alessio acusándolo de asociación ilícita por extorsión a un empresario agropecuario a quien le exigía 300 mil dólares a cambio de desvincularlo a la causa en que se investigan pago de sobornos en obra pública a raíz de los cuadernos del chofer Oscar Centeno.

El juez procesó a D’Alessio con prisión preventiva por la extorsión hacia el empresario Pedro Echebest quien formalizó la denuncia en la que quedó implicado el fiscal federal Carlos Stornelli, quien investiga la causa de los cuadernos, pues el detenido decía actuar en connivencia con aquel.

“Corroborada la relación entre Stornelli y D’Alessio y sus características, más allá de la necesaria continuidad de la investigación, entiendo que -al menos por el momento- se ha constatado que existen maniobras puntuales que revisten una gravedad institucional mayúscula que no es posible pasar por alto, en las que se constata la participación directa del fiscal”, sostuvo el magistrado en su fallo.

D’Alessio fue detenido cuando a partir de una nota periodística se lo sindicó como autor de una extorsión a un empresario para no vincularlo a la causa de los cuadernos, y si bien en los mensajes de la maniobra él decía actuar en connivencia con el fiscal Stornelli luego lo desmintió al momento de ser indagado.

En su fallo, el juez Ramos Padilla aseguró que “aparecen muchos elementos que lo vinculan (a Stornelli) con esos hechos de extorsión -lo que amerita profundizar su investigación- y también aparecen elementos de prueba que lo vinculan con otras operaciones ilegales”.

“Es imposible delimitar el objeto y alcance de la investigación, que incluye posibles actividades ilegales que aún no ha sido posible determinar en otras jurisdicciones”, señaló en su fallo.

“Si, como decía D’Alessio, se hallaba realizando una investigación paralela a las judiciales, sin orden de las autoridades jurisdiccionales y sin ser un agente de inteligencia autorizado para ello -pues la AFI lo ha negado-, nos encontramos frente a hechos aún más graves: la aplicación de mecanismos extorsivos o coactivos ilegales con fines investigativos -por más loables que pudieran ser los fines buscados”, según el juez.

El juez Ramos Padilla dijo que “si bien podría concluirse que, en principio, Stornelli no estaría involucrado en la exigencia de dinero a Etchebest” dijo que igual “amerita” investigarse el rol del fiscal federal quien -según dijo- tuvo rol “promiscuo”.

“Como ya se ha dicho, D’Alessio no era un simple extorsionador u operador judicial que habría girado a un fiscal descuidado, sino alguien que se presentaba como agente de la DEA y se ponía al servicio del fiscal para realizar tareas de investigación y espionaje”, sostuvo.

D’Alessio fue procesado por asociación ilícita en carácter de miembro en concurso real con el delito de extorsión en perjuicio de Pedro Etchebest, y le impuso un embargo de 10.000.000 de pesos.