Autoridades de Fauna Argentina manifestaron su preocupación por ataques de jaurías en el puerto, los cuales provocaron la muerte de dos lobos marinos en un lapso de 15 días.

En este marco, alertaron que “hay que tener sumo cuidado” con esta situación, debido a que una vez que estos animales “empiezan a atacar en manada, no se sabe si pueden empezar a atacar a la gente también”.

El presidente de Fauna Argentina en Mar del Plata, Juan Lorenzani, explicó en diálogo con LU6 Radio Atlántica que “mayoritariamente los lobos que salen a las playas, ya sea en la zona del Torreón, Unzué, La Perla, son lobos de dos pelos, que es una especie distinta a la que se puede encontrar al lado interno de la escollera sur, que son lobos de un pelo y son más grandes, de mayor porte”.

“El lobo marino de dos pelos es muy migratorio y tiene que hacer salidas para tomar descanso y luego seguir su camino”, agregó.

Continuando con su relato, Lorenzani indicó que el domingo “un lobito de dos pelos salió a las playas del puerto” y desde la Fundación Fauna Argentina acudieron al lugar tras el llamado de un vecino.

“Se hizo el protocolo que siempre se hace, que es cercar al animal para que la gente no lo moleste y de cierta forma poder concientizar de esa manera”, señaló Lorenzani y añadió: “Hasta ese día nos quedamos hasta las 20, el animal estaba en perfectas condiciones hasta que en la madrugada nos enteramos que un grupo de perros lo atacó y le dio muerte”.

“Esto no sería la primera vez que pasó, porque hace 15 días atrás un trabajador vio como un grupo de perros, que puede ser el mismo, hizo lo mismo con otro lobito de dos pelos que salió a la costa”, lamentó.

En este sentido, remarcó que la especie de dos pelos “son lobos más chicos, de menor tamaño, que muchas veces son confundidos con cachorros”. “Son animales de entre 1.10 y 1.20 metros, y ante un grupo de perros tiene muy pocas posibilidades de defenderse”, dijo.

“Esto nos preocupa”, aseguró el referente de Fauna Argentina, aunque aclaró que “se puede tratar de un grupo de perros, pero no de todos, porque en el puerto hay una cantidad de animales que son protegidos por las mismas fábricas, la gente que trabaja en las lanchas, pero este es un grupo que posiblemente esté en la zona de la reserva del puerto”.

“Se supone que estos animales son más salvajes”, manifestó y analizó que “la solución no es fácil” porque estos “grupos específicos que actúan como manada suelen estar “entre los pastos y no se hacen ver”.

Ante la consulta sobre por qué estos perros realizan estos ataques, Lorenzani consideró que se trata de una “cuestión instintiva”. “Seguramente el grupo está liderado por un alfa, que es el que dirige y cuando atacan le dan muerte al animal y lo dejan ahí, no lo comen. Es un instinto que los hace cazar en grupo, pero no es por hambre porque le dan muerte y lo dejan ahí”, señaló.

Sumo cuidado

En otro tramo de la entrevista, el presidente de Fauna Argentina en Mar del Plata recordó que “hace dos años unas turistas, unas señoras, se quejaron porque se le vinieron encima un grupo de perros de esa zona”.

“Hay que tener sumo cuidado con esto”, agregó Lorenzani en referencia a que las jaurías y alertó que las mismas “pueden atacar a una persona también”.

Para el especialista la solución “sería agarrar al macho o hembra alfa, sacarlo del grupo y luego intentar resociabilizarlo para alguna familia que lo pueda querer”.

“No tiene porque haber agresión hacia los animales”, remarcó, pero manifestó que la situación los “preocupa porque en 15 días hubo dos muertes de lobos de dos pelos”.

“Una vez que empiezan a atacar en manada, no se sabe si pueden empezar a atacar a la gente también”, concluyó.