Así lo advirtió Adelina Martorela, titular de la sucursal afectada. La protesta se inició ayer. Piden medidas que ayuden a aliviar la situación social.
La protesta de las organizaciones sociales que se inició ayer después del mediodía frente a la sede de Anses de Luro y Jara escaló, en horas de la tarde y ante la falta de respuestas, en un acampe que mantiene interrumpida la circulación de autos por la avenida Luro, de Jara a Francia.
A su vez, la titular de la sucursal afectada, Adelina Martorela, anunció que la sede permanecerá cerrada en tanto se continúe desarrollando la manifestación. “Para cualquier trámite, dirigirse a las otras delegaciones de Anses”, advirtió.
La manifestación se encuentra en sintonía con la jornada de protestas que se vivieron ayer en Capital Federal y responde al reclamo por medidas económicas concretas para aliviar la situación que viven los sectores más vulnerables de la sociedad.
Cerca de las 13.30 de ayer, comenzaron a llegar a la dependencia pública las columnas de Barrios de Pie, Movimiento Teresa Rodríguez, Votamos Luchar, B.u.e.l.t, entre otras organizaciones con representación local, que bajo el objetivo de conseguir una reunión con las autoridades del espacio, instalaron en el lugar ollas populares y cortaron la circulación vehicular de la avenida Luro, desde Jara a Francia.
“Las razones por las que hoy estamos acá son las mismas que venimos arrastrando las últimas semanas. Lamentablemente no tuvimos hasta el momento respuestas concretas respecto al aumento que exigimos para los Salarios Complementarios, los Hacemos Futuro y todos los programas de empleo que se dan a nivel social”, señaló el dirigente de Barrios de Pie, Rodrigo Hernández, quien también destacó que el Gobierno no incluyó en ninguna de las medidas “pos-devaluación” a los sectores sociales, “que son los que peor la están pasando”.
Actualmente los programas sociales vigentes son el Salario Social Complementario y el Hacemos Futuro y brindan $7.500 a los beneficiarios, quienes deben presentar documentación que verifique su asistencia a las clases del Fines y determinadas cantidades de horas de trabajo comunitario en los barrios, entre otras exigencias. Solo en el MTR y Votamos Luchar hay 100 beneficiarios, mientras que hay más de 200 personas a la espera.