En la última jornada del juicio contra el oficial de la Policía Bonaerense Sebastián Leiva por haberle provocado severas lesiones a un cartonero durante un procedimiento, tanto la fiscalía como el abogado particular de Ángel Oscar Aristimuño consideraron que actuó de manera desproporcionado y solicitaron que fuera condenado y que quede inhabilitado para ocupar cargos en las fuerzas de seguridad.

Leiva llegó a juicio, desarrollado en el Juzgado Correccional N° 1, imputado por “vejaciones en acto de servicio agravadas por haber causado un grave daño en la salud“. En su alegato, el fiscal Pablo Cistoldi solicitó que fuera condenado a 2 años de prisión y quedara inhabilitado por 4 años.

Por su parte, el abogado particular de la víctima, Maximiliano Orsini, en sintonía con el planteo de la fiscalía pidió una pena contra Leiva de 2 años y 6 meses de prisión y el mismo tiempo de inhabilitación: 4 años, al entender que incumplió con la Ley 13.482.

El hecho

Captura de imagen del video que tomó la cámara de seguridad ubicada en el lugar del hecho.

La agresión ocurrió en la madrugada del 25 de noviembre en la esquina de Fleming y Azopardo, hasta donde llegó el móvil policial de la comisaría tercera a bordo del cual iban Leiva y su compañera. Los policías dijeron posteriormente, a través del acta de procedimiento, que Aristimuño había tenido una actitud violenta y que había tenido un intento de agresión.

Lo que sucedió, que quedó registrado por una cámara de seguridad de una vivienda, fue que Aristimuño presentaba una notorio andar inestable y no pareció ni abalanzarse sobre la mujer policía ni pretender agredirla.

En el video, que fue analizado en el juicio, se puede ver como Leiva le pega una patada a la altura del pecho de Aristimuño y le da un empujón que hace que el cartonera caiga y dé su cabeza contra el suelo. Acto seguido, la compañera de Leiva se toma la cabeza, como entendiendo la gravedad de lo que acababa de ocurrir.

Aristimuño, al golpear su cabeza contra la cinta asfáltica, sufrió traumatismo de cráneo encefálico, lesión que le
generó un grave daño a su salud, por lo que estuvo tres meses internado en el Hospital Interzonal.

Una agresión desproporcionada 

En su alegato, el abogado Maximiliano Orsini aseguró que quedó “claro” que fue “innecesario” el uso de la fuerza por parte de Leiva, ya que no había necesidad de repeler ningún tipo de agresión. Aristimuño, esa madrugada, estaba claramente alcoholizado y se presentaba en estado de vulnerabilidad ante cualquier ataque físico.

“La víctima ya tenía una traqueotomía, tenía que tocarse el parche para hablar y cuando se toca ahí, los policías reaccionan: Leiva lo empuja, lo patea a la altura del pecho y ahí da la cabeza contra el asfalto”, explicó Orsini, quien agregó: “El daño fue muy grave, incluso el perito explicó que las lesiones pusieron en riesgo real la vida de Aristimuño“.

“El policía incumplió con la ley, ya que tiene que actuar en forma racional, progresiva y en forma proporcional a la agresión que pueden estar sufriendo. Acá no sucedió nada, no había un ataque. Ni siquiera había personas en los alrededores acechando a la policía, no se ve gente en los videos, nada”, concluyó Orsini ante la consulta de LA CAPITAL.

Por su parte, la defensa de Leiva solicitó la absolución del imputado, al explicar que actuó acorde a la ley. La sentencia la dará a conocer el juez Leonardo Celsi la próxima semana.