Aprobó las ordenanzas fiscal e impositiva en la Comisión de Hacienda. Contienen un incremento promedio del 27,3% en la tasa de Servicios Urbanos.
Al bloque oficialista del Concejo Deliberante el escándalo de la detención de Emiliano Giri no lo frenó: ayer, después de las 18 (un horario inusual), convocó a una reunión de la Comisión de Hacienda para darles despacho a las ordenanzas fiscal e impositiva.
Se trata de las normas que complementan el presupuesto y establecen una suba promedio del 27,3% en la tasa de servicios urbanos.
Las ordenanzas fueron aprobadas por los concejales del partido del intendente Carlos Arroyo (Agrupación Atlántica) y su socio en Cambiemos, el radicalismo. El resto de los bloques se negó a participar del cónclave.
“No creo que después de todo lo que pasó vayan a reunir a la comisión para tratar el aumento de tasas”, comentaban concejales opositores antes de que, efectivamente, el presidente de la Comisión e hijo del intendente, Guillermo Arroyo, ordenara llamar a las oficinas de los concejales para convocar a la sesión.
Al aumento de tasas todavía le queda un largo camino antes de ser aprobado definitivamente. En principio, podría ser votado por la mayoría oficialista en una sesión convocada para mañana. Pero además necesita el aval de una asamblea de concejales y mayores contribuyentes, donde puede tener complicaciones: los mayores contribuyentes todavía responden a la vieja composición legislativa, en la que Cambiemos no tenía mayoría.
Para calcular la tasa de servicios urbanos, la administración tomó en cuenta la valuación fiscal provincial de 2015 en un 50%, cuando hasta el presupuesto anterior se había utilizado la de 2006. “De manera que el aumento, a partir de la tercera cuota, obedece a un cambio de la valuación fiscal utilizada”, sostiene Cano en el mensaje de elevación del proyecto al Concejo.
Según el proyecto oficial, la tasa que más aumentará es la de habilitación de comercios e industrias: 40%. Le sigue el estacionamiento medido (33,3%). Luego, entre otras, la de publicidad y propaganda, que sube 30%. Por su parte, la contribución para la salud y la Girsu (gestión de residuos urbanos) se incrementarán 20%.