Peñarol, a puertas abiertas, realizó en el microestadio “Domingo Robles” su primer entrenamiento para la próxima Liga Nacional de básquetbol con la presencia de todos sus jugadores nacionales, salvo Pablo Alderete, quien está jugando el tramo decisivo de la Liga de Baloncesto de Ecuador con Punto Rojo Lenín Robles.

“Hay material para ser protagonistas. Peñarol no puede aspirar que a otra cosa que realizar una buena campaña”, afirmó el presidente Alejandro Amoedo cuando se dirigió al plantel y al público que se congregó en el gimnasio peñarolense.

Adrián Capelli, el flamante DT, por su parte, destacó la trayectoria del equipo en la Liga y la importancia del respaldo del público. “Llego a un club con mucha historia en la Liga Nacional. Aspiramos a que la gente nos acompañe como sucede habitualmente y nosotros vamos a hacer lo mejor posible para estar a la altura de ese apoyo”, dijo para los presentes.

Adrián Capelli habla y los perimetrales escuchan. En Peñarol ya se palpa ambiente de Liga Nacional.

Los jugadores Bruno Sansimoni, Joaquín Valinotti, Joaquín Cabrera, José Defelippo, Facundo Tolosa, Tomás Monacchi, Cristian Cardo, Ignacio Bednarek, Agustín Cáffaro y Nicolas Franco fueron los protagonistas de este primer encuentro.

El cuerpo técnico de Adrián Capelli se completa con los asistentes Mariano Rodríguez (sigue del ciclo anterior) y Hernán Ferrero y con el preparador físico Ignacio Costa.

Alderete se sumará cuando termine su preparación en Punto Rojo de Ecuador y Al Thornton, el único extranjero confirmado, se comprometió a integrarse hacia el 15 de setiembre.

Nada se resolvió sobre el segundo extranjero. Lo único seguro es que será un interno. En principio, había un dinero previsto para esta contratación que se fue achicando en la medida que se disparaba a las nubes el valor del dólar. Los dirigentes eran partidarios de aguardar a qué ocurría con las oscilaciones de la moneda para definir los pasos a seguir.

La práctica comenzó con una entrada en calor y luego Capelli dispuso de ejercicios de finta y tiro para los perimetrales y de pick and roll para los internos.

Por último, está en duda la realización del partido amistoso entre Peñarol y Quilmes previsto para el próximo 24 de setiembre. Pese al entusiasmo que generó el anuncio, sobre todo el del Clásico de las Leyendas, la dificultad para completar ambos planteles es un punto que genera incertidumbre. Por caso, Leo Gutiérrez, sólo por poner un ejemplo, no podrá asistir porque entonces estará ocupado con la pretemporada de Olímpico de La Banda. El otro gran impedimento, tal vez el más importante, es que todavía no se definió un sponsor para el evento.