El dirigente de Nuevo Encuentro, José Luis Zerrillo, advirtió acerca de la existencia de posibles delitos en la designación de funcionarios políticos en la Secretaría de Educación
entre los cuales se encuentran parientes y allegados de sus actuales titulares.

El abogado señaló que no sólo resulta objetable el uso de horas docentes asignadas a escuelas para realizar esta clase de nombramientos, sino que también en algunos casos existirían objeciones de tipo legal que deberían ser tratadas por la justicia. Puntualmente se refirió al caso en el cual una de las personas designadas fue nombrada para desempeñarse como profesora de enseñanza artística en el Instituto de Formación Docente Almafuerte, sin haber dictado jamás clases en este establecimiento.

“En principio desde el Código Penal se puede hacer una interpretación y hablar de delitos contra la administración pública que se cita en el artículo 246 inciso 3, donde se habla sobre el funcionario público que ejerce una función correspondiente a otro cargo”, explicó el abogado.

Por otro lado se refirió al rol de Crovetto al decir, “sería posible que sea investigada y pasible de sanción, en la figura de malversación”. Esto porque “se hace una designación con un decreto promovido por la Secretaria de Educación, dando un destino a los fondos públicos diferente, ya que esas horas estaban designadas para el Almafuerte para estar frente a alumnos, no como funcionaria.”

Zerillo consideró que “ante la escasez de recursos manifestada por el gobierno actual, destinar horas de la educación pública -que es un área sensible-, a funciones administrativas en beneficio de tareas personales en un cargo político, es una conducta por lo menos cuestionable”.
A lo que añadió: “En el caso de Guzmán que utilizó bienes públicos para cuestiones personales se le pidió la renuncia, es raro que a Crovetto esto no le esté costando su cargo”.