Para reírse de los errores, Pinti afirma “Otra vez sopa!”
Monólogos de humor político serán parte de esta propuesta teatral que apunta a repasar la actualidad y la sucesión de hechos parecidos a lo largo de la historia nacional.
Con su tradicional humor político, Enrique Pinti desembarcará esta noche en Mar del Plata para poner en escena un monólogo en el que repasa los eternos dilemas de los argentinos y de sus representantes. Será a las 21 en el escenario del Teatro Bristol (Santa Fe 1751).
“El título del espectáculo lo dice todo: ‘Otra vez sopa‘. Es la repetición constante que tiene la historia argentina y todos los temas que he tratado a lo largo de más de treinta y cinco años en todos mis espectáculos, tienen actualidad porque son los temas eternos. No son los mismos monólogos, son los mismos temas”, explica el humorista y actor, que estrenó el show en enero último en Buenos Aires.
En el unipersonal, el actor pasa revista de la actualidad y la historia argentina reciente. Dueño de un estilo verborrágico y siempre crítico que mostró en su memorable “Salsa criolla” y en otros espectáculos como “Candombe nacional”, Pinti llegará ahora para explicar, según su particular estilo, cuáles son los dramas nacionales que gobernantes y ciudadanos repiten con fervor.
Lejos de hastiarse o de deprimirse por la sucesión de hechos parecidos que tienden a regresar, el cómico defiende al poder superador de la risa. “El humor es fundamental, no hay que perderlo nunca, pero el humor también sirve para poder poner una perspectiva a través del chiste. A través del vidrio deformante del humor uno puede aclarar más las cosas”, asegura a LA CAPITAL.
Aunque es uno de los que siempre dice presente en los veranos, Pinti no sabe con exactitud si será de la partida.
“No creo que haga una temporada, está complicado para quedarse dos meses, probablemente haga algunas apariciones” y agrega que trabaja a en la adaptación al formato televisivo del libro “Del Cabildo al shopping. Pesadillas de la historia argentina” que escribió hace unos años.
“La gente está huyendo un poco de los espectáculos en los que les hablan demasiado, porque hoy en día la política ocupa muchos minutos de televisión, antes había programas políticos de vez en cuando, en cambio ahora todo es política, hasta los shows de espectáculos y los magazines están en un sesenta por ciento dedicados a la realidad política o a la realidad social. La gente está tan saturada. Y de repente los espectáculos como el mío que hablan directamente de la realidad por ahí tienen un poco más de resistencia. Dicen ‘esto ya lo escuché como ochenta veces’. El gusto del público va por el gran espectáculo, aunque las localidades sean caras, son espectáculos más livianos que ayudan a olvidar un poco lo que ocurre. Los que hacemos un humor más crítico la tenemos más difícil”, reconoció, pero fiel a sí mismo, nunca se da por vencido.