El ex presidente del Colegio de Abogados, Fernando Román González, consideró “un desatino” que el intendente Carlos Arroyo piense en venderle a la Provincia el predio de la obra del Centro Cívico del Oeste para construir la Ciudad Judicial.
“Estoy preocupado porque me parece que (el intendente) mezcló necesidades propias de una administración con intereses de una comunidad respecto a lo que debe ser el destino de la Ciudad Judicial”, dijo González a LA CAPITAL.
El ex titular del Colegio (2006-2014) se manifestó en contra de las declaraciones que hizo el miércoles Arroyo en una conferencia de prensa. “No tengo recursos” para continuar la obra de Libertad y Tandil, dijo el jefe comunal. Y agregó: “He visto la posibilidad de ofrecérsela a la Provincia para que comiencen hacer ahí la Ciudad Judicial y obtener dinero a cambio para poder encarar otras cosas”.
González no tardó en responder. “Yo puedo entender que necesite dinero, que no le alcancen las tasas, las proyecciones que tiene el intendente para administrar la ciudad. A ese predio lo puede vender, lo que no puede hacer es mezclar un trabajo de años, de tres gestiones, inclusive la propia del radicalismo”, con las necesidades del municipio, indicó.
González recordó que las gestiones por la Ciudad Judicial se iniciaron durante la intendencia de Daniel Katz y continuaron en la gestión de Gustavo Pulti. “(Arroyo) no puede desconocer el trabajo que se hizo”, lanzó.
Marcó además que hay una ley que cedió las tierras de forma gratuita a la Provincia. “La gobernadora de la provincia de Buenos Aires lo que tiene que hacer es destinar los fondos necesarios” para la obra, puntualizó.
Incluso hubo un concurso de ideas arquitectónicas para el diseño del edificio de la Ciudad Judicial. “Los edificios, en el diseño, son espectaculares, modernos. Y él quiere cambiarlos. La verdad es que no lo entiendo. Me parece desatinado, inapropiado”, señaló.
El Centro Cívico del Oeste, la obra que se inició durante el gobierno de Pulti y quedó inconclusa, fue pensado para alojar dependencias municipales, no judiciales. “Esto me hace acordar a cuando, hace muchos años, me preguntaron si el edificio del Hotel Provincial podía ser sede de la Ciudad Judicial. Yo contesté que era como pensar a la justicia en ojotas. Hoy conocemos el Hotel Provincial como destino turístico, no para que desde allí se imparta justicia. No me imaginaría gente imputada yendo a ir a prestar declaración indagatoria al Provincial”, comentó.
González dijo no tener “verificación” de que Arroyo haya comentado su intención “ni con el Colegio de Abogados ni con el resto de la comunidad jurídica”.
Además, le recomendó al intendente “que se asesore con su secretario de Gobierno”, Alejandro Vicente. “Con él hemos trabajado” en el tema, indicó, y deseó que Arroyo “pueda preguntarle y asesorarse con su gabinete de lo que fue la historia y el presente de la Ciudad Judicial”.
A propósito, mencionó que sigue bajo análisis un financiamiento internacional de la obra a través del Banco Interamericano de Desarrollo. “Es lamentable (lo que dijo), espero que cambie y se pueda rectificar. Que no mezcle los temas. Es un agravio a tantos años de trabajo”, disparó.
González destacó que la Ciudad Judicial es un anhelo de todos”. Y explicó: “Los operadores jurídicos van a trabajar en la Ciudad Judicial, pero los beneficiarios directos de todo esto son los ciudadanos, que van a tener todo junto, en un lugar apropiado, ni más ni menos que la Justicia, uno de los valores esenciales de la República”.
La construcción de la Ciudad Judicial está prevista en los terrenos de la vieja estación de cargas del ferrocarril, ubicados en avenida Juan B. Justo y Pehuajó. “En esto trabajamos el gremio, el Colegio de Abogados, los magistrados… Buscamos el lugar, el intendente Katz lo encontró, y trabajamos con los distintos gobiernos, el de (Néstor) Kirchner, el de Cristina Fernández”, señaló. E insistió: “No es solamente para los abogados y los jueces, sino que es fundamentalmente para que, en un edificio acorde, a la gente se le pueda tomar declaración testimonial sin que le caigan los expedientes encima”.