Palermo: “Cuando las prioridades del club no son las mismas que uno tiene se hace difícil”
Martín Palermo habló con LA CAPITAL horas después de haber presentado su renuncia al cargo de entrenador del club portuense.
A Martín Palermo se lo percibe dolido aún pese a haber sido quien decidió terminar unilateralmente el contrato con Aldosivi. En la vida, a veces uno se ve forzado por las circunstancias a tomar decisiones que no querría.
Horas después de haber presentado su renuncia como entrenador del elenco portuense, el exgoleador de Boca se acercó al predio a despedirse de sus ahora exdirigidos y de todo el personal del club. Es que Palermo y su cuerpo técnico habían generado un gran clima de trabajo con casi todas las áreas de la institución. Había buena química.
Por su forma de ser, una vez más Palermo elige no ir al choque. Acepta el diálogo con LA CAPITAL para intentar explicar los motivos de su partida pero no apunta contra nadie en particular, aunque en cada rincón del mundo aldosivista no se hable de otra cosa que no sea como le soltaron la mano al técnico desde la cúpula dirigencial, ausentándose de la ciudad en pleno mercado de pases y a días del arranque de un campeonato que trae nada menos que el regreso de los descensos.
“Acá estamos tratando de hacer el duelo después de la despedida. Vimos a todas las áreas del club muy dolidas por este final. Golpeados pero agradecidos por el trato y la convivencia que hemos tenido”, confía Palermo en el arranque de la charla con este medio.
“Es una lástima que se termine así pero los motivos están más que claros. Cuando las prioridades del club no son las mismas que uno tiene se hace difícil”, sostiene.
Por momentos pareciera que Palermo hace un esfuerzo por no herir susceptibilidades. Entonces que hay que saber leer entre líneas para decodificar los motivos de su alejamiento.
“Por ahí nunca sentí que lo que conseguimos haya sido importante. Que le haya dicho a San Lorenzo que no porque quería respetar mi contrato con Aldosivi, que hicimos debutar a juveniles en primera, que asumimos cuando estábamos últimos en los promedios y hoy estamos vigésimo primeros y a quince puntos de Patronato, que conseguimos una clasificación histórica… Por momentos parecería que uno hizo poco. Si eso fue poco y uno no se siente acompañado es difícil”, enumera.
“Desde que llegué a hoy no se cuál es la proyección del club. Porque todos quieren jugar una Sudamericana pero para eso tenés que estar preparado. Tenés que ir formándote en varios aspectos. A veces el jugador necesita estar más acompañado en el día a día. Y uno mismo sentirse acompañado para que se vea lo que se va trabajando” desliza como una suerte de reclamo por la escasa presencia de la cúpula dirigencial en lo cotidiano.
“Cuando hoy llegué al predio la decisión ya estaba tomada. Los vi a todos muy sorprendidos y muy tristes. El área médica, la utilería, los jugadores, las chicas de marketing, prensa. Fue un momento triste porque además había mucha ilusión en seguir creciendo juntos”, remarca.
Palermo no quiere olvidarse de nadie. Cada dos frases suelta palabras de agradecimiento para con todos los empleados del club. “Desde el canchero hasta los profes de inferiores”, agrega.
Consultado por aquella charla con San Lorenzo en este mismo mercado de pases Palermo aclara: “hace quince días hablé con Matías Caruzzo y le agradecí pero le dije que iba a respetar el contrato con Aldosivi. Y cuando llegué acá para arrancar la pretemporada se lo conté a Josesito y fui claro. Matías me llamó por la relación personal que tenemos después de haber jugado juntos pero le dije que quería quedarme en Aldosivi”.
Palermo presentó su renuncia a una semana del inicio del campeonato (Aldosivi visita a Argentinos Juniors el lunes desde las 21.30), sin refuerzos contratados y con el hombre fuerte del club, José Marcelo Moscuzza, y el manager Ciro Lubrano, fuera de la ciudad.
Ante la pregunta de si eso había sido el detonante para su renuncia Palermo primero se encargó de desmentir algunas versiones.
“No es verdad que me voy porque tengo ofertas de otros clubes, porque no me trajeron refuerzos o porque estoy peleado con alguien. Que los dirigentes no estén en la ciudad en el mercado de pases son cuestiones internas del club. Como se manejan en la conformación del plantel a una semana del campeonato son temas del manejo del club. Por ahí es el acompañamiento que uno necesita”, desliza.
Más allá de las tratativas dirigenciales, sabido es que Palermo, por su propio apellido y su vínculo eterno con Boca Juniors, también tenía la oportunidad de buscar refuerzos. De hecho una gestión suya con Juan Román Riquelme permitió a principio de año la llegada de Agustín Lastra y Nicolás Valentini, ambos cedidos por el “xeneize”.
“En estas dos semanas habíamos hecho un seguimiento muy preciso porque el mercado de pases es muy complicado. Estuve viendo opciones y esperando jugadores pero no había nada en concreto. Yo todavía no le había elevado ningún nombre a Josesito. Nos habíamos juntado en la primera semana de entrenamiento para decirle a qué jugadores no iba a tener más en cuenta y qué puestos deberíamos reforzar. Solo eso”, confiesa.
“Hablé con Román (Riquelme) para ver qué jugadores podían quedar disponibles de Boca. Hablamos de (Esteban) Rolón y quedamos en volver a conversar por él y otros jugadores más tarde. Pero no llegué a ofrecerle nada a Josesito porque todavía nada de eso era concreto”, advierte.
La salida de Aldosivi genera también un trastorno familiar, ya que Palermo se había instalado aquí con su círculo íntimo.
“Mi hijo empezó primer grado y ahora hay que pensar en volver a traspasarlo a una escuela en Buenos Aires. Es movilizar a la familia. Estábamos muy involucrados con el club. La idea era cumplir el contrato y después ver cómo seguíamos. Siempre con el deseo de aportar desde mi lugar”, se lamenta.
Desde que hizo saber su determinación de partir su teléfono no paró de sonar. Y las redes sociales se inundaron de muestras de apoyo de los hinchas de Aldosivi.
“Estoy agradecido con este grupo de jugadores que me hizo seguir creciendo como entrenador. Que permitió que se refleje el trabajo del cuerpo técnico. Porque el equipo tuvo una identidad, mostró lo que quería más allá de tener buenos o malos pasajes. Se llegó a lograr algo importante para la institución como fue haber clasificado a cuartos de final”, valora.
“Me voy con ese acompañamiento del hincha, todos los mensajes que he recibido desde el dia de ayer…”, agrega.
Consultado si había recibido el llamado de algún dirigente de Aldosivi Palermo confiesa que con el primero que habló fue con José Américo Moscuzza.
“La primera comunicación que tuve fue con José padre. Él fue quien me contactó en un primer momento para venir. Estaba sorprendido. Hoy él está alejado del club y se vio sorprendido, no se lo esperaba. Después pudo contactarme con Josesito y le transmití mi decisión”, sostiene.
La buena campaña realizada en Aldosivi hará que seguramente Palermo tenga ofertas en breve para seguir trabajando en el fútbol argentino, al que volvió con el club marplatense tras siete años en el extranjero.
“No estoy pensando en eso ahora. Siempre trato de dar vuelta la página, hacer ese pequeño duelo que es necesario. Por lo que uno había proyectado acá. Todo este desgaste y esta movilización interna me cuesta y no me permite estar enfocado en la necesidad de trabajar. Hay mucho estrés acumulado y uno tiene que desconectar para volver a estar al 100% para un nuevo desafío”, afirma.
“No quería irme del club mal con la familia Moscuzza porque soy un agradecido a la oportunidad que me dieron. Como así también agradecer a los hinchas, los jugadores y la gente que trabaja en el club”, repite en el cierre de la charla con LA CAPITAL.
En la tarde de hoy, Martín Palermo y su cuerpo técnico se despidieron con unas sentidas palabras dirigidas a todo el plantel y trabajadores del club.
Posteriormente, el D.T. de la reserva se hizo cargo de las prácticas como interino de la primera división. pic.twitter.com/Iv8Gir7O2p
— Club Atl. Aldosivi (@clubaldosivi) May 31, 2022