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Cultura 6 de junio de 2017

“Palabra de Borges”, nueva edición de la Academia Argentina de Letras

por Sebastián Jorgi

En la introducción, Rolando Costa Picazo nos advierte: “Este libro recopila opiniones, dichos y observaciones de Jorge Luis Borges, extraídos de sus escritos y de entrevistas ofrecidas a lo largo de su vida. En su conjunto, aspiran a dar un esbozo de su pensamiento, de su persona y de su obra”. Y vaya que tal aspiración la ha cumplido, porque el itinerario de esta antología borgeana va desde palabras autobiográficas (imperdible esta secuencia en la primera página), pasa por el tema de la amistad, un diálogo con Victoria Ocampo, tratos con figuras como Macedonio Fernández, Carlos Mastronardi y Xul Solar. En este tramo, obviamente, María Kodama, a la que le escribe: “De usted es este libro, María Kodama.¿Será preciso que le diga esta inscripción comprende los crepúsculos, los ciervos del Nara, la noche que está sola y las populosas mañanas, las islas compartidas, los mares, los desiertos y los jardines, lo que pierde el olvido y lo que la memoria transforma, la alta voz del muecín, la muerte de Hawkwood, los libros y las láminas?” (de Los conjurados, 1985).

Tenía pensado al paso de esta nota, de esta aproximación al mundo de Borges y a la estructura que ideó Costa Picazo, ordenar mi bibliográfica respetando la paginación—si se me permite el término, que se propuso nuestro autor—pero me fue imposible. Uno va y viene en la ansiedad de acaparar temas, como el truco, “memorioso como una fecha” (de El idioma de los argentinos,1928) o “cuarenta naipes han desplazado la vida. Pintados talismanes de cartón /nos hacen olvidar nuestros destinos” (de Fervor de Buenos Aires, 1923).

Sí, además del truco, la milonga, los patios, la pampa, Adrogué. Pero es dable esclarecer al lector sobre la estructura de Palabra de Borges, de lo contrario, sería traicionar la propuesta didáctica del autor: introducción, autobiografía, Argentina: lugares, costumbres y personajes argentinos, la ceguera, la familia, filosofía y cuestiones de fe, la historia, temas y protagonistas, la literatura: temas y autores, palermo en su juventud, la política, recurrencias temáticas, referencias a su propia obra, temas ocasionales. A este esquema, se suma un Apéndice: La entrevista, una encrucijada genérica y Jorge Luis Borges, escrita por Rolando Costa Picazo. Con lo que se redondea—se me permitirá este lenguaje popular—este libro único, sí: tan único como indivisible, para ofrecernos a los lectores, borgeanos o no, un amplio espectro de la vida literaria del autor de La cifra y de ese mundo abarcador de su sabiduría, de aquellas miradas irónicas sobre la definición del argentino o su prisma crítico sobre Góngora, Kafka, Lugones, Joyce, Quevedo y Villegas, Stevenson. Y el humor, claro, con la contracara ácida si usted se detiene en la página 162 para leer “La hipocresía argentina” y en la página siguiente “King Kong”( de sus artículos sobre cine, recordemos que Borges hacía notas de cine en El Hogar).

Hay muchos cortes más en Palabra de Borges, un libro que uno podría tenerlo en la mesita de luz y releerlo, abrirlo en cualquier página, ir y venir en la lectura, gozándolo, para entrar en ese fabuloso mundo de Borges, interminable. Y que en 185 páginas Rolando Costa Picazo, con síntesis abarcadora, mediante una didaxis muy bien estructurada temáticamente, lo ha escrito. Excelente edición de la Academia Argentina de Letras.

Cabe señalar que Rolando Costa Picazo es profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Ha traducido Los cuentos completos de Edgar Alan Poe, ha publicado ediciones críticas de Hamlet, El Rey Lear, (Shakespeare), Los papeles de Aspern y Una vuelta de tuerca de Henry James. Ha traducido a Hemingway, Faulkner, Capote, Mailer y Eliot. Ha recibido el Premio Konex de Platino y el Premio Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires. Es miembro de número de la Academia Argentina de Letras.