Bajo la helada mañana de este lunes, una multitud de vecinos de los barrios de la periferia de la ciudad se concentraron en plaza Rocha para participar de la iniciativa “Diez mil cartas contra el hambre y la exclusión”, convocada por Barrios de Pie, la Confederación de los Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC).

Allí, cientos de mujeres, hombres y niños depositaron en las urnas cartas dirigidas a los funcionarios municipales en las que describieron el panorama que se vive en los cerca de 300 comedores y merendedores de Mar del Plata. La propuesta, según indicaron, buscó reclamar por mejoras en las políticas sociales, tales como el aumento en las tarjetas de alimento, la creación de la tarjeta refuerzo para comedores comunitarios, además del refuerzo de alimento y la provisión de garrafas para el correcto funcionamiento de los espacios.

“A partir del diagnóstico que hacemos desde nuestras organizaciones, propusimos que sean las propias familias las que cuenten cómo se vive en los barrios más humildes de la ciudad. Desde hace tres semanas que comenzamos con la iniciativa y hoy lo llevaremos a la Municipalidad”, señaló a LA CAPITAL Rodrigo Hernández, de Barrios de Pie.

El referente también aseguró que la medida busca apelar a la “sensibilidad” de los funcionarios locales, únicos capaces de mejorar parte de la realidad que atraviesan hoy los sectores más vulnerables.

“Nosotros vemos que hay una situación de crisis, diagnóstico que compartimos con el resto de las organizaciones, pero también con los vecinos de a pie. El aumento del dólar, que pareciera solo una cuestión de números, impacta profundamente en el día a día de la gente y lo vemos en nuestros comedores, los merenderos y polos productivos. Cada vez se acercan más en busca de un plato de comida o la oportunidad de trabajar en alguna de las cooperativas”, señaló.

Hernández también se refirió a los anuncios que realizó María Eugenia Vidal la semana pasada en materia de políticas sociales para paliar la crisis. Según indicó, la decisión de la gobernadora “evidenció” la existencia del problema, algo que calificó como “positivo”, pero no por eso satisfactorio.

“El tema es que es insignificante lo que se plantea. Se habla de mil tarjetas de cinco mil pesos cada una para ayudar a las escuelas, cuando acá en Mar del Plata tenés solo 300 funcionando, ni hablar en el conurbano bonaerense”.

La columna de organizaciones partieron a las 10.30 desde plaza Rocha en dirección a la Municipalidad. Una vez allí, realizaron ollas populares y levantaron carteles con las consignas de la convocatoria como “El hambre no puede esperar” y “Ante el hambre, Macri da palos”.