Los referentes del Consejo Municipal de Discapacidad (Comudis) y la Multisectorial de la Mujer, Gabriel Lalli y Laura Hochberg, repudiaron los dichos del intendente Carlos Arroyo y exigieron un pedido de disculpas públicos luego de haber defendido el Servicio Militar y haber dicho que el mismo debería incluir a “mujer y discapacitados”, éstos últimos para darles un “motivo para vivir”.

“Una persona con discapacidad quiere trabajar, quiere que la Municipalidad cumpla con el cupo. No fue un exabrupto del intendente, es lo que él piensa, y me inquieta que los funcionarios no repudien sus dichos”, señaló a LA CAPITAL Lalli, quien también se mostró “sorprendido” ante la falta de repudio en las calles y la falta de acompañamiento de “candidatos”.

“Lamento que el repudio no haya alcanzado mayor notoriedad en la calle. Me preocupa que aquellos que se sienten afectados por lo que ocurrió no estén acá repudiando, manifestando. Lo habrán hecho por Whatsapp, por Facebook, pero queda todo en un círculo cerrado”, señaló molesto.

En este sentido, Lalli exigió que Arroyo “pida disculpas”. “Pero para pedir disculpas hay que reconocer que hubo un error, y él no lo va a hacer. Uno ha pedido disculpas y pide disculpas en la vida, no tiene nada que ver con una postura filosófica o política, es humana”, indicó.

En la misma línea se pronunció la referente de la Multisectorial, Laura Hochberg, quien aseguró que “Arroyo se tiene que disculpar con las mujeres, con las personas con discapacidad y con los jóvenes, a quienes también agravió”. “En una ciudad que tiene los más altos índices de desocupación, las mujeres y los jóvenes son justamente son los que más sufren esta situación”, indicó.

Además, agregó: “Ya nos mandó a barrer veredas, ahora al Servicio Militar. Lamentablemente el intendente Arroyo nos tiene acostumbradas. Que haya defendido los dichos de la ministra Patricia Bullrich es porque piensa que la institución más importante de la Argentina es la Gendarmería y no la escuela pública”.

Hochberg insistió en que el intendente debería abocarse al cumplimiento de la emergencia en violencia de género y diversidad, que rige hace tres años en el municipio y, según señaló, “las respuestas han sido nulas”. “Nunca le importó, no hay políticas públicas efectivas ni presupuesto adecuado”, cerró.