La ONG Fundación Maravillas realizó ayer un acto para conmemorar el Día Internacional del Niño Oncológico en la puerta del Hospital Materno Infantil, donde niños y niñas vivieron “una mañana maravillosa”. Esta organización le cumple sueños a niños y niñas con enfermedades crónicas graves y se encargó de “repartir alegría, gracias al apoyo de diferentes empresas de la ciudad”, entregaron 250 bolsitas de desayuno y globos de diferentes colores.
Todos los pequeños fueron recibidos por los personajes de la obra teatral “Alicia en el mundo de los relojes mágicos”, quienes, voluntariamente, se ofrecieron a colaborar. Además, el pochoclero marplatense Raúl se sumó a la conmemoración y regaló bolsitas de pochocolos.
María Alejandra Díaz, presidenta de Fundación Maravillas, remarcó que todos los miembros de la ONG están “muy felices porque arrancamos bien temprano y tuvimos mucha convocatoria. Realmente fue una mañana muy alegre y tuvimos la bendición de que no lloviera para poder conmemorar esta fecha, como lo hacemos desde hace varios años”.
El 15 de febrero del año 2001 un grupo de familiares y amigos realizaron en Luxemburgo una suelta de globos para que el mundo tome conciencia de la importancia del diagnóstico temprano y el tratamiento del cáncer en los niños y niñas. Desde entonces se conmemora el Día Internacional del Niño Oncológico y, como todos los años, Fundación Maravillas propuso que los pequeños que concurren diariamente al Hospital Materno Infantil vivieran un día diferente.

La Fundación Maravillas

Fundación Maravillas es una organización no gubernamental que funciona en Mar del Plata desde hace 12 años y que tiene como objetivo principal “crear las condiciones humanas, económicas y sociales para hacer realidad el sueño de un niño o niña de entre 4 y 16 años que padezca una enfermedad crónica grave o que pueda poner en peligro su vida”. Además la ONG se encarga de “promover resiliencia en los niños y sus familias -desarrollando la capacidad humana de enfrentar, de sobreponerse y de ser fortalecido e incluso transformado por las experiencias de la adversidad- y de colaborar con las instituciones que asistan a los niños enfermos y sus familias brindando el apoyo que, fuera de los objetivos específicos, la fundación esté en condiciones de ofrecer”.