Horas faltan apenas, entre la apatía y el desinterés de gran parte de los marplatenses y batanenses, para que se realice la primera radiografía electoral en la que se convirtieron estas PASO. Tras una campaña tranquila, llega la hora de votar en la previa de octubre, en comicios en los cuales, por lo menos en el plano local, lo más interesante pasará por determinar quien se queda con el segundo lugar, descontada la victoria de la lista encabezada por Vilma Baragiola (Cambiemos), según marcan todas las encuestas. Pero, ciudad rara si las hay en materia política -aquí supo ganar alguna vez Francisco De Narváez y Elisa Carrió-, la victoria del oficialismo, por lo menos en el plano local, llegará en el marco de una cierta crisis en la alianza gobernante, a partir del hecho de que el intendente de la ciudad, otrora orgullo de Cambiemos, hoy aparece marginado y con una relación más que distante tanto con la Provincia como con la Nación. Al mismo tiempo, al menos dos secretarios del gabinete -uno de ellos supo ser un “talibán”, instando a su jefe a dar peleas estériles- no tienen reparos en decir en voz alta que quieren renunciar. Será entonces una victoria “extraña”.  Pasada la contienda electoral, será tarea de los distintos operadores al menos, intentar reconstruir esos puentes. Por el bien de la ciudad.

Es que la gobernadora María Eugenia Vidal estuvo el lunes por tercera vez en pocos días en Mar del Plata, y ni siquiera se cruzó con el intendente Carlos Arroyo. De hecho, hubo un pedido especial para que el jefe comunal no tomara parte del acto en Quilmes, como ya había sucedido anteriormente, incluso durante la ceremonia el acto de la llegada del tren que el intendente debió presenciar como un espectador más, lejos de los focos de la televisión. El malestar con Arroyo es más que evidente -tampoco participó del encuentro del Jefe de Gabinete, Marcos Peña, con los intendentes de la zona- y el panorama se agravó aún más cuando el jefe comunal días atrás dijo que los aportes y ayuda de Nación y Provincia al distrito se basan en la necesidad del triunfo de Cambiemos, lo cual le dio pie a figuras de la oposición, como la intendenta de La Matanza, a hablar de discriminación del gobierno de Vidal.

Esto a su vez motivó que las máximas espadas de Cambiemos -incluso la gobernadora- tuvieran que salir a aclarar los dichos de Arroyo, quien sin dudas debe sentirse molesto por este “ninguneo” al que está siendo sometido. Ya ni siquiera le dejaron la alternativa de poder defenderse diciendo que no es candidato y en consecuencia no participa en actos proselitistas, como venía ensayando ante consultas “molestas” de la prensa. Este lunes, antes del acto en Quilmes, Vidal estuvo en el Puerto reuniéndose con sectores locales. El hombre del piloto azul tampoco estuvo. “¿No es un error marginarlo tanto?”, se preguntaba en la noche del lunes un operador local de Cambiemos, quien teme que esta situación se descarrile. Por ahora, Arroyo ha acatado mansamente las decisiones que llegan desde la Provincia esperando que tras las elecciones las aguas se aquieten y todo vuelva a la normalidad.

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Vaya si es extraña la política lugareña. Viene la gobernadora, la política que mejor mide en Cambiemos, y “esconden” a quien consideran el intendente “de peor gestión en toda la provincia”. Pero el domingo ganará Cambiemos en Mar del Plata con la mujer (Vilma) que perdió hace dos años con ese Arroyo y que tiene grandes chances de ser su sucesora en 2019. Todo esto ha pasado en menos de dos años. Quien ayer era rubio y de ojos celestes hoy, por no medir en las encuestas, es alejado. Así de dura es la política. Pero también es necesario recordar que en las ultimas PASO, exactamente fueron 13.426 los votos que separaron a Carlos Arroyo, ganador el 9 de agosto de 2015, de los obtenidos por el ex intendente Gustavo Pulti. Arroyo cosechó entonces 111.048 adhesiones, el 32,44 por ciento del total. Vilma Baragiola, quien perdió aquellas internas de Cambiemos ante el hoy intendente, recibió 67.950 votos, el 19,85 por ciento del total, duplicando a lo reunido por tres juntos que compitieron en octubre de aquel año, tales los casos de Lucas Fiorini (18.261), Alejandro Martínez (5.009) y Pablo Farías (4.614). De los 18 precandidatos de aquellas PASO, solo quedaron 5 en pie.

Lo cierto es que a Arroyo, que en las PASO obtenía 111.048 votos, no se le dio ninguna participación no solo en esta campaña sino en el armado de la lista, habiendo logrado apenas el sexto lugar para su yerno, Mauricio Loria, lo cual originó los primeros chisporroteos en esta nueva etapa. Es el mismo Arroyo que en octubre de 2015 se convertía en el intendente de General Pueyrredon con el 47 por ciento de los votos del electorado, 183.686 sufragios, contra 144.108 (36,87) de Gustavo Pulti, quien así veía frustrada su reelección. A todo esto, el actual jefe comunal sigue rodeado por tres o cuatro personas en una oficina cada vez más hermética donde entran “sólo los que dicen lo que el jefe quiere escuchar”, señala un hombre de la privada, sorprendido por las nuevas restricciones. Allí muchos abonan estrategias e ideas que finalmente generan más costos que beneficios. Arroyo viene de una semana dura, donde el titular de la Fundación Global, Fernando Alvarez, a pedido de segundas líneas de la Provincia, tuvo que hacer malabares para bajarlo de un panel sobre ventajas competitivas de exportar desde Mar del Plata. Tampoco al intendente le fue bien en una visita a Alto Camet, cuando se encontró con algunos vecinos más que exaltados. Y el fin de semana esperó el llamado telefónico para la invitación al acto de Quilmes. Un llamado que nunca llegó. Sí recibió la declaración de Vidal a través de los medios. “Mi apoyo a Mar del Plata no tiene que ver con una elección”, expresó la gobernadora.

“En política todo cambia muy rápido”, dicen desde el búnker de Baragiola -en el acto del lunes les habló a las mujeres y fundamentalmente a los indecisos, casi un 20 por ciento del electorado en estas horas-, quien se impondrá el domingo en esta radiografía, exactamente veinte años después de su debut electoral, cuando fue candidata a concejal por la Alianza, en 1997. Hace dos años Vilma obtenía 67.950 votos, que sumados a los 110.048 de Arroyo le daban a Cambiemos 177.998 adhesiones de marplatenses y batanenses que luego, en octubre, le sumaron 5.688 votos más. Si bien es cierto que esta vez no habrá competencia interna en Cambiemos, habrá comparaciones entre lo recolectado por dicha alianza hace dos años y lo que coseche Vilma el domingo, quien esa misma noche dará el puntapié inicial en su carrera hacia la intendencia de 2019.

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Las dos visitas de la gobernadora en menos de 15 días (tres si se tiene en cuenta la del acto por la llegada del tren) le meten más presión aún a Vilma, quien sabe que la fuerza que hoy representa necesita como oro cada voto en esta región para poder compensar los que perderá en el conurbano. De eso también hablaban, en la noche del lunes frente a los ventanales desde donde veían llover, los miembros del equipo de Vidal en el NH Gran Hotel Provincial, mientras evaluaban como positivo el acto realizado antes, aunque desde el núcleo más cercano a la gobernadora estaban más contentos con la reunión desarrollada a la tarde en el Puerto. La Provincia resolvió junto a empresarios y dirigentes sindicales la implementación de un amplio paquete de medidas para la pesca. Contempla ayudas para trabajadores y beneficios para empresas. Inyectarán más de $1.200 millones en el sector.

La gran incógnita del domingo es quién obtendrá el segundo lugar. ¿Será para Acción Marplatense (con los votos sumados de las listas de Marcelo Artime y Juan Rey, en la más importante definición concreta que surgirá de las PASO locales? ¿Será Ariel Ciano, ex AM y hoy crédito de 1País, con el apoyo del diputado provincial Javier Faroni y el líder renovador Sergio Massa o sorprenderá el kirchernista Marcos Gutiérrez, con el arrastre que significará tener a Cristina Fernández en la otra punta de la boleta? El randazzista Fernando Maraude y el histórico representante de la izquierda, Alejandro Martínez, al igual que el ex secretario de Seguridad (cargo que ocupó apenas algunas horas), Julio Razona, en tanto, buscarán el pasaporte que los lleve a octubre. Entre los nombrados, y no más de otros dos candidatos como máximo, quedará conformada la grilla para octubre. “Pasarán 6, 7, 8″, decía con ironía un concejal del Frente para la Victoria.

La misma pregunta sobre la actuación de Cambiemos habrá que responder con lo que suceda con Acción Marplatense, en la primera interna de su historia, y sin la participación directa de su máxima figura, Gustavo Pulti. ¿Podrán las listas de Marcelo Artime y Juan Rey alcanzar los 97.622 votos que obtuvo el ex intendente el 9 de agosto de 2015?. En las PASO 2015, cabe recordarlo, Cambiemos llegaba al 52,29% contra el 28,52% del Frente Marplatense. Ni Baragiola ni Artime lograrán el domingo superar esas cifras. En octubre de 2015 Cambiemos finalmente logró el 47 por ciento (5,29% menos que en las PASO) y el Frente Marplatense el 36,8 por ciento (8,28 por ciento más que en las PASO). También es necesario señalar que en 2015 había más interés en las PASO, especialmente por las definición de Cambiemos entre Arroyo y Baragiola. A nival local votaron 380.514 personas, el 68.35 por ciento del total. “Dudo que se llegue a ese porcentaje”, expresó uno de los hombres que conoce al dedillo los circuitos electorales locales y que en la tarde del sábado compartió un café con el ex ministro de Transporte, y candidato a senador Florencio Randazzo, en el Hermitage.

En definitiva, Mar del Plata, como el resto del país, se apresta a vivir una fiesta democrática. Afortunadamente, toda la campaña transcurrió en calma, y no dejó de ser una gran noticia, al menos como gesto, la firma del acta entre las distintas fuerzas políticas a través del cual se busca promover y fortalecer la convivencia democrática. “Se pretende garantizar una campaña libre, que no afecte el espacio público ni permita agravios entre los candidatos”, se consignó desde las distintas fuerzas que rubricaron el acuerdo. Luego del domingo, tras unos pocos días de descanso, los hombres y mujeres de la política local, estarán pensando en octubre, la “verdadera batalla” y volverán a tratar de convencer a ese electorado volátil, que en Mar del Plata ha dado más de una sorpresa en los últimos años.

Las intensas lluvias volvieron a provocar inconvenientes en Mar del Plata. En la mañana desde este martes, desde el NH Gran Hotel Provincial donde pernoctó antes de su viaje a Azul, la gobernadora Vidal le dijo a María Delia Sebastiani que ya había recibido informes sobre las zonas más castigadas de la ciudad a raíz de las intensas precipitaciones. En tanto, el precandidato de AM, Marcelo Artime, adjudicó el desborde los arroyos en distintos puntos de la ciudad a la falta de capacidad para gestionar del actual intendente. “El arroyo Corrientes se desbordó porque el Arroyo intendente no lo limpió más desde que asumió”, señaló tras constatar el estado del lugar. El del barrio San Jacinto es un caso testigo, ya que la anegación de calles y los problemas ocasionados por la falta de limpieza de los arroyos por parte del actual gobierno municipal, se repiten en los otros cuatro arroyos principales.

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A pocas horas de la veda, este jueves, en el Club Peñarol, se juntarán más de 1.500 fiscales de Unidad Ciudadana Mar del Plata – Batán, la lista de Cristina Fernández de Kirchner, con la presencia del propio candidato principal de la misma, el actual concejal Marcos Gutiérrez y el resto de los postulantes, entre ellos Virginia Sívori, Daniel Rodríguez, Verónica Lagos y Roberto “Chucho” Páez, entre otros. El encuentro se desarrollará con la consigna “para cuidar los votos de Cristina” en la ciudad. Mientras tanto, los candidatos de “La lista de Cristina en Mar del Plata” siguen recorriendo los barrios de la ciudad, en encuentros con vecinos, además de mantener reuniones con empresarios, distintos colegios de profesionales de Mar del Plata y representantes de fuerzas vivas de la ciudad.

El viernes pasado, en esa línea, llegaron los candidatos a diputados nacionales Hugo Yasky y Leopoldo Moreau, y no solo se comprometieron con los candidatos marplatenses en las recorridas por barrios, plantas que pasan por dificultades económicas y comercios perjudicados con las políticas económicas en vigencia, sino que ambos además grabaron videos de adhesión. “En Mar del Plata con lista completa, con Marcos a la cabeza”, dice Moreau, referente del alfonsinismo en Unidad Ciudadana, en uno de esos videos. En esa misma tónica, otra candidata a diputada nacional en la lista de Cristina, Vanesa Siley, con la actual diputada, Fernanda Raverta, escucharon el sábado a la mañana a trabajadores de la ciudad de distintos gremios en La Bancaria, junto también a los postulantes marplatenses principales, Marcos Gutiérrez, Virginia Sívori, Daniel Rodríguez, Verónica Lagos y “Chucho” Páez. Ambas, Vanesa Siley y Fernanda Raverta, encabezaron enseguida junto a la concejala marplatense Marina Santoro, un encuentro de mujeres de la ciudad en Sadop.

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En tanto, las encuestas que llegan hasta el búnker del cristinismo generan optimismo. Este martes en la tarde mostraban los números de una prestigiosa encuestadora nacional, que señalaba que Cambiemos obtendría 32 puntos en esta ciudad, Cristina 24 y Massa 20. “Si la jefa mide 24 en Mar del Plata ganamos la provincia por 5 puntos”, deslizaba con optimismo el ex funcionario provincial quien se acercó a dar una mano en el último tramo de la campaña.

Cortitas y al pie. El sábado presento su nuevo libro en Mar del Plata el periodista Edi Zunino. Llegó a la ciudad acompañado por su esposa y pudo disfrutar el fin de semana. Pero cuando culminaba la presentación todos se sorprendieron ante el hombre que, entre el público, tomó la palabra. Era nada más y nada menos que Mario Pontaquarto, el “arrepentido” del resonante caso de coimas en el Senado, quien resaltó la figura de Zunino. // El secretario municipal explotaba de bronca cuando le contaba al periodista lo que había pedido la ex concejal para asumir como parte del gabinete municipal. “Como perdía los módulos le pidió al intendente que sus dos hijos sean incorporados a planta permanente de la comuna.Y lo peor es que Arroyo aceptó. Para más datos, uno irá a Inspección General.¿Cómo hacemos después para decirle a la gente que sobra personal si seguimos incorporando agentes por favores?”, resaltaba indignado -sonaba creíble- el funcionario que en pocas semanas ya amenazó dos veces con renunciar. // Gracias al Nuevo Codigo de Publicidad van apareciendo algunas pantallas leds en determinados puntos de la ciudad. Días atrás comenzó a funcionar una en la neurálgica esquina de Tejedor y Constitución. “¿Quién será el primer distraido que se dará la piña por mirar el cartel en esta esquina?”, se preguntaba el histórico mozo del café, ya cansado de ver choques frente a sus narices pese al semáforo. El de la pantallas es un negocito que, para algunos, ya comienza a funcionar y a rendir.