Murió el editor Manuel Pampín, fundador de Ediciones Corregidor
Fue impulsor de las bibliotecas populares y fundador de sello que publica desde hace más de 50 años a autores como Haroldo Conti, Juan Gelman, Alejandra Pizarnik, Clarice Lispector, Juan Carlos Onetti y Osvaldo Soriano. Tenía 86 años.
Manuel Pampín.
El editor Manuel Pampín, impulsor de las bibliotecas populares y fundador del sello Ediciones Corregidor que publica desde hace más de 50 años a autores como Haroldo Conti, Juan Gelman, Alejandra Pizarnik, Clarice Lispector, Juan Carlos Onetti y Osvaldo Soriano, falleció este jueves a los 86 años en el Hospital Italiano de la ciudad de Buenos Aires.
Pampín nació el 23 de noviembre de 1936 en el pueblo español Vilar da Vela, de La Coruña, y llegó a la Argentina en 1951; durante años fue librero, trabajó en una distribuidora de libros y en julio de 1970 fundó Ediciones Corregidor, sello fundamental para pensar la configuración de la literatura nacional de mitad del siglo XX y de la literatura latinoamericana del siglo XXI.
De esta manera se convirtió en un referente para el resto de los sellos independientes del mercado editorial. En 2017 fue elegido editor del año en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires y en 2020, cuando el sello celebró las cinco décadas, la Cámara de Diputados lo condecoró por su trabajo y trayectoria como editor independiente.
Dolor en el ambiente literario
Querido y respetado entre escritores, bibliotecarios y pares por la impronta que dejó en medio siglo de oficio, las despedidas comenzaron a sumarse en las redes sociales.
“Despedimos con calidez a Manuel Pampín, fundador de Corregidor. Agradecemos su trabajo, el amor por los libros y el decisivo aporte a la cultura con la difusión de algunas de las obras argentinas más destacadas del siglo XX”, sostuvo la Dirección de Asuntos Culturales de Cancillería desde su cuenta en X.
“La Conabip lamenta el fallecimiento de Manuel Pampín, entusiasta impulsor de la llegada de las Bibliotecas Populares a la Feria del Libro”, posteó la Comisión Nacional Protectora de Bibliotecas Populares desde su cuenta.
“Acompañamos y abrazamos a toda la familia Corregidor en su pérdida. Se fue un editor imprescindible. Un militante de la cultura y de los libros. Es tan fuerte su legado que su nombre ya es historia y seguirá siendo presente”, lo despidió la revista cultural Continuidad de los libros.
Mientras que desde la librería No tan Puan postearon: “Adiós a Manuel Pampín, el fundador de la queridísima Ediciones Corregidor. A él le debemos los libros de Alejandra Pizarnik, Macedonio Fernández, Clarice Lispector y Arturo Jauretche. Piloto de tormentas, prócer de la supervivencia, editor fino y rotundo. Adiós y gracias”.
La editorial
Con un catálogo con una fuerte impronta latinoamericanista y una historia que incluye la publicación de obras completas de Marco Denevi, la recuperación de los trabajos de Macedonio Fernández o la edición de la poética de Olga Orozco, Alejandra Pizarnik y Susana Thénon, Corregidor cumplió 53 años produciendo sentido en la vida cultural de la Argentina y la región.
La editorial, que continúa trabajando, estuvo desde los últimos años a cargo de sus hijos Paula, Juan y Fernanda, y de su yerno Norberto Gugliotella. Muchas veces tentado por grandes grupos internacionales, Pampín insistió en que el sello continuara siendo un proyecto nacional y, además, familiar.
“Desarrollamos y mantenemos las colecciones de literatura latinoamericana. El hecho de ser una editorial independiente nos permite tomar nuestras propias decisiones, que también implican riesgos, pero que son garantía de bibliodiversidad”, contó Paula Pampín a Télam en 2020, cuando el sello celebró las cinco décadas.
Durante una entrevista con Tiempo Argentino publicada en 2020, María Fernanda Pampín reconstruyó los primeros años de su padre en Buenos Aires, tras pasar su infancia en España, adonde había sido repartidor de leche y pastor de ovejas.
“Llegó a los 14 años huyendo de la España que había atravesado la Guerra Civil y de la dictadura de Franco. No quería venir a la Argentina. Incluso se escapó antes de subir al barco. Primero había venido parte de su familia, como se hacía en ese momento, y luego de conseguir trabajo, viajó el resto. Entonces llegó mi abuela con dos de sus hermanas, porque la tercera nació acá. Mi padre cuenta que le habían dicho que Buenos Aires era una ciudad grande y moderna, y que cuando llegó y vio el puerto se le vino el mundo abajo. Se instalaron en Lanús, donde había una comunidad grande de gallegos y donde mi padre vive actualmente. Poco a poco comenzó a ocuparse en diferentes trabajos”.
El primer libro publicado por Corregidor fue “Los caudillos de la Revolución de Mayo”, de Rodolfo Puiggrós, que llegó a los lectores en 1971, y por esos años se publicaron varios libros del mismo autor: “La democracia fraudulenta”, “La España que conquistó al Nuevo Mundo”, “Pueblo y Oligarquía” y “El Yrigoyenismo”.
“La historia del tango”, que lleva 22 volúmenes y en la que participaron más de 200 autores y autoras, es uno de los proyectos que marcan la identidad del sello. El primer libro que censuró la dictadura también fue de Corregidor: “Olimpo”, de Blas Matamoro.
En los últimos 20 años, la editorial creada por Pampín condensó colecciones de literatura que recorren el continente latinoamericano como Vereda Brasil (en la que se encuentra Silviano Santiago, que obtuvo varios premios internacionales, así como Ferreira Gullar); Vía México; Archipiélago Caribe (donde publicaron a Simone de Eduardo Lalo, ganador del Premio de Novela Rómulo Gallegos); Narrativas al Sur del Río Bravo (Débora Mundani y Ariel Urquiza, ambos ganadores del Premio Casa de las Américas); y La Inteligencia Americana.