Por Sebastián Arana

Los cuarenta y dos minutos restantes del partido que había comenzado el domingo y dejó trunco la niebla transcurrieron sin novedades ni oportunidades. Los DT intentaron corregir el rumbo, en vano, con varios cambios de timón. Alvarado y Estudiantes de Rìo Cuarto no entraron en ritmo, no mejoraron y terminaron redondeando un empate sin goles grande como el “José María Minella” por la vigésimo segunda fecha de la Primera Nacional de fútbol.

Los dos entrenadores intentaron sorprender. Coyette aprovechó el día de diferencia y lo mandó a la cancha a Julián Vitale, reestablecido de su desgarro. Matías Rodríguez salió de la formación titular y ni siquiera integró el banco de relevos.

Pero todavía movió más las fichas Gerardo Acuña, su colega de Estudiantes, que dispuso cuatro modificaciones. Ingresó Ceresole por el lesionado Padilla, variante que provocó el retroceso de Lautaro Formica al centro de la defensa. Pero eso fue solo el principio. Además ingresaron Romero por Correa (variante que ya había tirado en el entretiempo del domingo), Miño por Arturia y Müller por Talpone. Casi nada.

Con este ajedrez, Estudiantes se paró un poco más adelante y dispuesto a robarle la iniciativa a Alvarado. Y el equipo marplatense, pese al regreso de Vitale, continuó igual de peleado con la pelota que el último domingo. Con la intención de recorrer los caminos habituales, pero tropezando sistemáticamente con sus propios errores de ejecución.

Casi nada ocurrió en el primer “chico”. Apenas una salvada in extremis de Mieres para desbaratar un centro rasante y peligro que había cruzado todo el área chica. Y en la última jugada, en la primera maniobra bien urdida por Alvarado, Cadenazzi no llegó por milímetros a conectar un buen centro de Cáceres.

Coyette intentó una vuelta de tuerca más en la segunda parte con los ingresos de Irazoque por Cáceres y de Valiente por un bajísimo Astina. Así Alvarado jugó con dos referencias ofensivas –el propio Valiente y Cadenazzi- y Malagueño, Jaurena y Vidal intentando abastecerlos por detrás.

A partir del orden que insufló Vitale, Alvarado disfrutó de unos minutos de control de la situación, jugados en campo riocuartense, e intentó perforar por el lado de Mieres y Malagueño. Pero las imprecisiones en la culminación de los desbordes, sin embargo, lo diluyeron todo y Estudiantes terminó insinuando algo de peligro en un par de réplicas que terminaron controlado sendos buenos cruces de Irazoque y Ledesma.

En definitiva, ninguno de los dos entró en ritmo y este extraño duelo de dos días terminó con un cero a cero clavado. Alvarado, en el balance de los noventa jugados entre domingo y lunes, no pateó al arco. Y no puede salir de su bajón futbolístico.

Alvarado 0

Pedro Fernández (6); Brian Mieres (5), Alan Robledo (5), Franco Ledesma (6) y Darío Cáceres (-); Julián Vitale (6); Jaurena (5) y Franco Malagueño (5); Ezequiel Vidal (5), Cadenazzi (5) y Astina (-). DT: Gastón Coyette.

Estudiantes (Río Cuarto) 0

Brian Olivera (6); Franco Pardo (5), Lautaro Formica (6) y Maffini (5); Adin (6), Gastòn Bottino (6), Abel Romero (5) y Ceresole (5); Cainelli (5), Miño (-) y Müller (5). DT: Gerardo Acuña.

Cambios: en el segundo tiempo, en el inicio, Irazoque por Cáceres y Mauro Valiente por Astina, 6’ Arturia por Miño, 14’ Emiliano Bogado por Mieres, Correa por Ceresole y Talpone por Müller.
Cancha: Estadio “Josè Marìa Minella” (aceptable).
Árbitro: Lucas Noveli Sanz (5).
Nota: Se completaron los 42’ restantes del cotejo que había iniciado el domingo en dos tiempos de 21’.

Sin descanso
Alvarado casi no tendrá descansos durante esta semana. El viernes abrirá la fecha 23 visitando desde las 17.10 a Temperley en el estadio “Alfredo Beranger”. Televisará TyC Sports.