Al teléfono celular del intendente Guillermo Montenegro y de su equipo llegan permanentemente mensajes y propuestas de empresarios y referentes de distintos sectores de la ciudad que piden adoptar medidas que permitan aliviar el impacto económico de la cuarentena. Son varias las actividades que sugieren alternativas para entrar en la flexiblización del aislamiento, como deslizó anoche el presidente Alberto Fernández.

Al anunciar la ampliación de la cuarentena, el presidente dijo que serán los intendentes y gobernadores quienes deberán analizar, definir y sugerir qué sectores podrían quedar exceptuados o bien tener mayor flexibilidad para volver a funcionar. Sin embargo, la aprobación o desautorización definitiva la tendrá el Gobierno nacional.

En este sentido, en Mar del Plata ya se analiza la situación. La preocupación es enorme entre los empresarios textiles, las pymes, la gastronomía, la recreación, la hotelería y el comercio en general, entre otros.

Montenegro reconoció que luego de que hablara el presidente, “se empezó a trabajar en ver en qué sectores de la ciudad la cuarentena podría flexibilizarse”.

Consultado por LA CAPITAL en ese sentido durante la conferencia en la que se anunció esta mañana la realización de testeos masivos a 1912 marplatenses que regresaron del exterior, el jefe comunal indicó que “se está trabajando en este momento en eso” y que se actuará en este sentido codo a codo junto al gobernador Axel Kicillof, en una nueva demostración de la intención de hacer a un lado cualquier diferencia política frente a la actual crisis sanitaria.

“Si bien nos están pidiendo recomendación, es el Gobierno nacional quien lo va a autorizar o no”, sostuvo Montenegro y aclaró que junto al gabinete y e infectólogos locales “se va a plantear cuáles son las actividades que podrían funcionar y cuáles no, de qué manera o en qué horarios según el caso”.

Lo cierto es que una vez que se releven las recomendaciones a nivel local, el listado de rubros y actividades que podrían estar exceptuadas o “aliviadas” será elevado al equipo del gobernador, quien se lo trasmitirá al presidente Alberto Fernández junto al relevamiento realizado en los 135 municipios de la Provincia de Buenos Aires.

Montenegro advirtió el impacto económico que la pandemia genera no solo en Mar del Plata sino a nivel mundial, pero reparó que a la hora de sugerir sectores en donde podría flexiblizarse el aislamiento, se tendrá en cuenta “la muy buena foto de la curva que tenemos en la ciudad” y “seguiremos siendo muy exigentes con la cuarentena” porque “toda ciudad que pensaba que le iba bien y se relajó, le fue muy mal”, advirtió.

“Hablamos con Viviana (Bernabei) permanente de esto. Y nos preguntamos cuándo viene el cachetazo. Y lo vamos a evitar si tenemos una cuarentena controlada, por eso debemos ser exigentes en el distanciamiento social, en el lavado de manos, en el uso de tapa bocas y otras tantas medidas que nos cambiaron la conducta social y que llegaron para quedarse mientras no exista una vacuna o un tratamiento específico; esto es una crisis y muy importante por cierto”.

Y en línea con lo que viene planteando el Gobierno nacional, el intendente Montenegro reafirmó que en simultáneo a las medidas de alivio económico para las Pymes y trabajadores, “la prioridad es la salud de los marplatenses”.