Después del retroceso a la fase 3, el intendente Guillermo Montenegro aseguró que se reforzarán los controles en el espacio público y en los locales comerciales para que se cumplan los protocolos de prevención.

Las declaraciones las formuló ayer durante una conferencia de prensa virtual donde anunció que hoy firmará un decreto en el que se especificará las actividades comerciales que estarán permitidas ya que con el avance del aislamiento la fase 3 ha sufrido cambios.

“Los controles son clave. Y hay dos partes muy importantes. Una es la responsabilidad que tenemos que tener cada uno. Es imposible ir a la casa de cada uno a ver qué están haciendo. Se apela entonces a la responsabilidad individual”, sostuvo Montenegro. Y, enseguida, agregó: “Se va a aumentar las áreas de control en el espacio público y en los locales para el cumplimiento de los protocolos. Entendemos que por estos diez días el espacio público va a ser un lugar donde se pueden generar encuentros”.

En ese sentido fue contundente: “Las actividades en la playa no están permitidas, las actividades en la costa no están permitidas y las actividades en la plaza no están permitidas”.

En otro tramo de la conferencia, el intendente dejó en claro que la determinación de retroceder de fase se tomó desde el Ejecutivo. “La decisión fue mía”, dijo. Y contó: “Se lo comuniqué al jefe de gabinete de la provincia, pero fue una decisión que tomamos nosotros por la situación que vemos: aumento de casos y el anuncio de la transmisión comunitaria. Queremos evitar que se complique la situación en el sistema sanitario. Entendemos que esta es la mejor forma para frenar la circulación de la gente que genera la propagación del virus”.

Montenegro contó que decidió mudarse de su casa desde que se anunció que en la ciudad hay transmisión comunitaria para cuidar a su mujer y sus hijos. “El virus puede estar en todos lados”, dijo.