La abogada y actriz Nicole Gonzalez (@DraNicoleG), quien se hizo conocida por sus videos con mensajes inspiradores y de humor, hará por primera vez temporada teatral en Mar del Plata. De la mano de Javier Faroni, estará en el Teatro Arenales, de martes a domingos con Bienvenida Nicole, un unipersonal “que no tiene nada que ver con la política sino con mi historia de vida”, según definió en una nota con LA CAPITAL.

Es que la comediante, trascendió como “la rubia peronista”, con sus monólogos políticos en los que, con mucho humor, abordaba las problemáticas sociales y económicas que atraviesan los y las argentinas.

“Me involucré en política por necesidad, para cuidar derechos que costaron mucho conseguir y que están en peligro”, aseveró en la charla con este medio Nicole, quien desde chica quiso dedicarse a la actuación, pero decidió estudiar derecho, hacer un master -en derechos humanos- para garantizarse su sustento.

Defensora de los derechos de las personas travestis y trans, asegura que mucho tiempo vivió la vida que otros quisieron que viva y no la que ella quería vivir. Por ello en este nuevo espectáculo que trabajó con el director Daniel Dátola, se vale de su historia de vida, para generar un unipersonal en el que, con humor, cuenta una historia inspiradora, de un camino difícil, de golpes, de caídas, pero también de superación y logros.

“Yo me hice conocida haciendo humor político, tratando, en momentos difíciles, de llevar una alegría a la gente. Con esa obra, en la que iba yo, con mi bolsito, recorrí bares, pequeños teatros de prácticamente todo el país”, recordó Nicole, en la charla.

Es una convencida de que “el humor acerca, con respeto, lo fui haciendo y me dio muchas satisfacciones. Pero cuando me contactó Faroni y me propuso generar un proyecto nuevo, le planteé algo que ya no tiene nada que ver con la política sino con mi historia de vida y le gustó”, contó.

Si bien no quiso adelantar mucho del show -“no quiero hacer spoiler”, dijo-, si explicó que “con el humor que me caracteriza y que es lo que más me gusta, trato de naturalizar cuestiones de mi vida, mi infancia, mi adolescencia, que fueron muy duras en su momento, para mostrar cómo llegué a ser esta mujer que se ve hoy, que soy hoy“.
Y continuó señalando que “con mucha profundidad me voy a referir a momentos de mi vida que no fueron fáciles, porque viví la vida que los demás querían que viva y no la que realmente quería vivir. Y a partir de ahí, mostrarle a la gente que todo es posible, que yo logré ser esta mujer valiente, que se muestra tal cual se siente, tal cual es, con la intención de que todas las personas que vean el espectáculo, les llegue el mensaje de que, claramente, la vida es una sola y que se la jueguen por cada una de las cosas que realmente les hace feliz sin pensar en la mirada del otro“. Y aclaró: “No tiene que ver solamente con una cuestión de género, sino con un montón de decisiones que las personas muchas veces dejan de tomar en su propia vida teniendo temor de la mirada del otro. Lo que trato de enfatizar siempre es que cada quién viva a su manera, que luche por lo que siente, que es posible”, sostuvo, con su objetivo de “inspirar, motivar”.

En ese punto reconoció que en realidad no le gusta la política. “Lo que pasa es que vengo de una familia muy humilde, me gusta recalcarlo porque he logrado recibirme de abogada, a los 22 años, hice una maestría en derechos humanos y realmente luché mucho por tener mi título y poder superarme. Si bien toda mi vida y mi vocación real es la actuación, yo pensaba en su momento que no iba a poder dedicarme a eso porque en este país es muy difícil vivir del arte. Entonces estudie para garantizarme tener trabajo, tener mi techo, poder abastecerme con mi profesión y poder dedicarme a esto como un hobbie”.

Y continuó: “Es muy injusto que las personas tengamos que estar tan inmiscuidas en lo que es la política, por necesidad. La vida es tan corta, tan complicada, que en lugar de estar disfrutando de nuestros logros, de nuestras cosas personales, de una película, por las realidades de nuestro país y el resto de Latinoamérica, tenemos que estar inmersos en cuestiones que tendrían que estar resueltas por los políticos. Nos hemos convertido en políticos, por obligación, para cuidar lo que tenemos”.

Y al respecto aclaró que, en su caso, específicamente, fue para “cuidar derechos conquistados, porque muchos derechos costaron mucho trabajo y en algún momento empezaron a peligrar y peligran en general por la coyuntura a nivel mundial, por esta tirantez donde se siente que los más poderosos quieren o tienen más poder a costa de los que menos tienen, de los que éramos clase media, que se ha disuelto”.

“La gente se merece sonreír”

De todas formas, Nicole asegura que “la gente se merece sonreír”. Eso fue lo que la motivó a “más allá de hacer política, hablar de las cuestiones políticas, pero con humor”.

Así surgieron sus videos, de poco más de un minuto, abordando los temas más diversos y mostrándose como más se gusta a ella misma.

“Me hice conocida subiendo fotos y videos con un mensaje, tratando de inspirar algo, en contra del bullying, en contra de la discriminación, en contra de los que creen que hay ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda. Muchos videos comenzaron a hacerse virales”, contó.

“Los pensé para las personas que laburan todo el día, apenas pueden pagar los servicios, comer y acostarse a dormir pensando en lo que tienen que laburar al día siguiente, lo pensé para poner una sonrisa en el día a día de la gente”.
Nicole analizó que “es verdad que he mostrado y muestro mucho en las fotos. Me muestro sexy y desprejuiciada, pero no es mi intención calentar sino mostrar la mujer libre que yo quise ser y mostrar también que merecemos respeto sea cual fuere el atuendo que llevemos puesto”.

“Seguimos viviendo en una sociedad muy machista, por eso quiero enfatizar la libertad del cuerpo de las mujeres y reafirmar que podemos lograr lo que queremos ser, que el respeto no va por la ropa que te pongas, pasa por otro lado”.

“Somos víctimas del celular”

Si bien está muy agradecida a las redes sociales por haber sido su plataforma a un reconocimiento que le abrió puertas de la televisión -fue panelista en un ciclo de las tardes-, asegura que “tengo mis cuestionamientos”.
“Somos víctimas del celular. Tenemos tanta facilidad de encontrar personas en redes sociales, sin necesidad de tomar algo, hay una oferta y demanda permanente, sin conversación, sin encuentro, sin contacto humano y muchas veces estamos más pendientes de eso que de las personas que tenemos realmente, físicamente al lado”, reflexionó.

Por ello, concluyó, “amo el teatro. Es lo único que aún conserva ese rato de apagar todo y conectarse con el espectáculo. Yo agradezco cada vez que me subo al escenario la posibilidad de estar una hora o una hora y media, mirándonos a la cara y compartir, sin mirar el celular”.